La situación para los perros callejeros en la ciudad pakistaní de Karachi es demasiado complicada, al punto que las autoridades han decidido sacrificarlos, debido a una ola de críticas y de denuncias de que los canes habían mordido a mujeres y niños.Por el momento,  ya fueron sacrificados un total de 1.050 perros que recibieron pastillas de veneno ocultas en la carne de pollo en la primera fase de la operación. Se tiene previsto matar a otros 2.000 perros en el transcurso de las próximas semanas.Te puede interesar: El héroe de los gatos en el conflicto de SiriaDe acuerdo con AFP, Rehan Hashmi, presidente de la jurisdicción municipal, dijo que las autoridades han recibido una ola de críticas de que los perros muerden a la gente y defendió el programa de exterminación de los canes, ya que la ciudad carece de recursos."Si hubiera algún otro recurso u opción, me hubiera encantado poder hacerlo", dijo Hashmi, quien agregó: "después de todo son seres vivientes".Según las estadísticas que reporta esta agencia de noticias se estima que en Karachi podría hacer hasta 35.000 perros callejeros y cada año se denuncian cerca de 15.000 ataques a humanos, aseguró Isma Gheewala, del Centro de Atención a los Animales.Según informa RT, la acción ha sido duramente criticada por usuarios de redes sociales, indignados ante los cientos de cadáveres de perros en las calles de la ciudad, donde son abandonados por los trabajadores.Advertencia: El vídeo podría herir suceptibilidades WARNING GRAPHIC: These stray dogs were poisoned via what local authorities in Karachi call a "gulab jaman " pic.twitter.com/bB98NIqxdM— omar r quraishi (@omar_quraishi) 4 de agosto de 2016Lee también: Primer operativo contra locales de la Caracas que comercializan animalesLamentablemente, en Pakistán el tema de los derechos de los animales no está presente en el debate público, pero de a poco surgen grupos de veterinarios y activistas que buscan encontrar un equilibrio para conciliar la vida de los canes con los miedos de la población, que en muchos casos los considera como impuros, en base a creencias religiosas.Varios colectivos de veterinarios han recogido perros y gatos para esterilizarlos con la intención de que la población no siga en aumento. ‘El principal objetivo es atrapar a los animales de la calle, vacunar y castrar a ellos y liberarlos después de un período de seis días‘, mencionó uno de los activistas.No dejes de ver: Vacunas: Cuáles son las obligatorias, las recomendadas y sus cuidados