Desde el fin de semana del 19 de marzo, Medellín está inmersa en un plan calculado de prevención contra el coronavirus. Así, el alcalde Daniel Quintero y el gobernador Aníbal Gaviria definieron un sistema de control llamado cuarentena por la vida, basado en la estrategia pico y cédula. Hoy, esa distribución es más laxa y se basa en números pares e impares. Ahora que más del 75 % del comercio está abierto y la ciudad ya parece de nuevo viva, el final de ese sistema de control no parece lejano.
Por ahora, el alcalde Quintero aseguró que el viernes 19 de junio, día sin IVA, la regla se levantará, lo que hace creer que pronto no habrá más pico y cédula y se confiará en lo que han llamado el aislamiento inteligente.
El metro de Medellín tiene controles estrictos. En rueda de prensa, Quintero dijo: “Hoy en Medellín lo único que está cerrado son los restaurantes y ya le dijimos al Gobierno nacional que tenemos una plataforma desarrollada en la Alcaldía para abrirlos. Nos dicen "todavía no", pero estamos listos. Nosotros lo que queremos es reactivar rápido”.
Así las cosas, la normalización de todo el comercio parece bastante cercana, pues los restaurantes solo están a un eslabón de que se puedan abrir, lo mismo que bares y cafés, dicen muchos ciudadanos en las redes sociales, lo cual no deja de causar sorpresa en una ciudad donde el mismo alcalde Quintero dijo hace pocos días que los días difíciles de contagio apenas están por llegar. Quintero quiere encontrar un equilibro entre el cuidado de la salud y la reactivación de la economía, lo que se mezcla con las ganas de muchos ciudadanos de volver a la vida social en las calles.