Desde el Congreso llegó una grave advertencia sobre la situación de los niños y niñas, muchos de ellos de la comunidad Wayúu, de La Guajira.
El senador del Partido de La U, Alfredo Deluque, denunció que los programas de atención dirigidos al bienestar de los menores de edad no han sido contratados, lo que tendría a unos 100.000 pequeños sin servicios del Estado.
“Los programas que atienden a la mayoría de nuestras niñas y niños, en especial a nuestras niñas y niños wayuú en el departamento de La Guajira y que están a cargo del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, no han entrado a operar. Es 5 de febrero y las unidades comunitarias de atención, así como los centros de desarrollo infantil no han sido contratados”, aseveró el senador Deluque.
La denuncia en cuestión hace referencia a los programas que están a cargo del ICBF para llevar alimentación a estas poblaciones que viven en una situación de pobreza, para los que el paquete de comida (o de suplementos) que les entrega el Gobierno en muchas ocasiones es el único alimento del día.
La situación tiene a los niños y niñas wayúu en riesgo y prueba de ello es que el congresista advierte que “eso significa que alrededor de 100.000 niños y niñas Wayuu están sin atención y sin alimentación, lo cual puede generar problemas muy importantes que pueden derivar incluso en la muerte de niños Wayuu. Ese tema es muy sensible porque operan muchos de ellos en la zona desértica de nuestro territorio”.
Alfredo Deluque le pidió a la directora del ICBF, Astrid Cáceres, que implemente los convenios con los operadores encargados de garantizar el cuidado, hidratación y nutrición de los niños que están entre los cero y los cinco años, que corresponden a la población que está bajo la tutela de ese instituto.
“Mientras el Gobierno de Petro, el presidente y muchas veces sus ministros se debaten en peleas intestinas en redes sociales, tratando de defender muchas veces lo indefendible, acá en el departamento de La Guajira tenemos un problema mayor y no está siendo atendido a tiempo”, sostuvo el senador Deluque.
Los problemas de desnutrición en La Guajira persisten, pese a que el Gobierno Petro anunció un plan especial para ese departamento. Es más, el mandatario estuvo despachando desde esa región durante una semana, pero su presencia en el territorio no calmó los problemas de los guajiros.
La situación es crítica, si se tiene en cuenta que se habían reportado 55 muertes de niñas y niños por causas asociadas a la desnutrición durante el año pasado, de acuerdo con datos reportados por el Instituto Nacional de salud hasta septiembre de 2023. Una proporción importante de las víctimas son integrantes de las comunidades indígenas.
“No puede ser posible que, con las altas cifras de desnutrición y de mortalidad de los niños guajiros, la falta de ejecución presupuestal del ICBF en la regional Guajira esté por encima del 50 por ciento; esto amerita, no solamente la urgente actuación de la Directora Nacional, sino también de los órganos de control para que se determinen responsabilidades por omisión en el cumplimiento de sus funciones a los funcionarios responsables”, llamó la atención el congresista del Partido de la U.
El pasado sábado 27 de enero el ICBF publicó un comunicado en el que detalló que la atención a la población infantil a través de diferentes servicios que quedaron contratados a finales del año pasado o que se firmaron a comienzos de ese mismo mes.
“En concreto, están operando 604 hogares comunitarios, 3 centros de recuperación nutricional, 52 profesionales de unidades móviles y se dio inicio al pilotaje de la Guía para la atención integral al pueblo Wayuu en 570 comunidades de las zonas rurales de los cuatro municipios de la Sentencia T-302 (Uribia, Maicao, Riohacha y Manaure) para la atención de 20.000 familias”, dijo el Instituto.