Luego de que el presidente de la República, Gustavo Petro, asegurara este martes, 22 de octubre, desde Florencia, Caquetá, sin prueba alguna, que los embalses que abastecen de agua a Bogotá iban a llegar a nivel 0 en marzo del año entrante, el alcalde Carlos Fernando Galán salió a desvirtuar lo dicho por el primer mandatario.
De acuerdo con las afirmaciones del presidente Petro, al finalizar el primer trimestre del próximo año, Bogotá podría entrar en sequía total.
“La ciudad de Bogotá es la capital de Colombia, y ahí viven 9 millones de personas. Y estamos muy preocupados porque una vez acabe la época de lluvias, que es más o menos diciembre, si es que apuntamos a un clima cada vez más variable, pues el mes de enero, febrero, marzo, sobre todo marzo, el embalse de donde sale el agua potable de Bogotá va a llegar quizás a cero”, indicó el presidente.
A renglón seguido, el primer mandatario expuso el panorama que se podría venir para la capital del país.
“¿Ustedes se imaginan qué tendremos que hacer con una ciudad de 8 millones de habitantes sin agua? Esa realidad que nos puede colocar en una emergencia, hasta nos tocaría llevar a muchos de ustedes allá a ver cómo hacemos para sacar población, para racionar el agua, para ver dónde conseguimos agua, esa realidad del clima que está cambiando que puede acabar con la especie humana porque estos son apenas los primeros indicios”, sostuvo Petro.
“Es falso”
Pues bien, como era de esperarse, el alcalde Galán no dudó en responder a lo dicho por el presidente Petro, asegurando que esa afirmación no tiene ningún sustento técnico e hizo un llamado a la responsabilidad.
“Ni Bogotá, ni Chingaza se van a quedar sin agua en marzo del año entrante. Esa afirmación no tiene ningún sustento técnico. Tenemos que ser muy responsables en las afirmaciones que se hacen en temas tan críticos como el manejo del agua y el acceso al agua para una ciudad como Bogotá”, manifestó Galán de manera tajante.
El burgomaestre señaló además que desde el Distrito se han tomado acciones sustentadas “con criterios técnicos, con todo el equipo del Acueducto, y también habladas con diferentes instancias nacionales e internacionales, para tomar las mejores decisiones”.
Y agregó: “Muchas ciudades del mundo han enfrentado situaciones críticas en abastecimiento de agua, y hemos tomado las decisiones correctas, difíciles, pero correctas para enfrentar la coyuntura. Y También estamos tomando las decisiones de largo plazo para que Bogotá no vuelva a tener una situación como estas”.
No habrá declaratoria de situación de desastre
La fuerte respuesta del alcalde Galán al presidente Gustavo Petro, llegó minutos después de que el Comité Conjunto Nacional para el Conocimiento del Riesgo y el Manejo de Desastres, tomara la decisión de no recomendar declarar situación de desastre por el desabastecimiento de agua en Bogotá.
Esa decisión del comité, que se tomó tras un análisis técnico riguroso, llegó a pesar de la recomendación que había hecho el presidente Petro semanas atrás.
Incluso el pasado 9 de octubre, después de una reunión en la Casa de Nariño, a la que asistió el alcalde Galán, la ministra de Ambiente, Susana Muhamada, había abierto la posibilidad a esa declaratoria de desastre.
“Hemos iniciado un trabajo conjunto para establecer un acuerdo entre el Distrito y el Gobierno nacional sobre el futuro del agua a corto, mediano y largo plazo. Eso implicará tomar medidas que tienen que ver con una posible declaratoria de desastre y que tendrán implicaciones durante el siguiente año. También, medidas de largo plazo en una mesa permanente”, fueron las palabras de la funcionaria del Gobierno nacional.
No obstante, este martes, el comité que fue liderado por el director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastre, Carlos Carrillo, tomó otra decisión.