Luego de que este martes (27 de febrero) se presentara una emergencia en la localidad de Suba, al noroccidente de Bogotá, cuando una formaleta con la que se está construyendo el puente en la intersección con la Calle 100 se viniera al piso, el alcalde Carlos Fernando Galán, entregó un parte de tranquilidad frente a lo ocurrido.
El mandatario distrital explicó, como ya lo había hecho el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), qué fue lo que realmente ocurrió en esta zona de la capital del país.
En primera medida, el burgomaestre subrayó que “el puente de la calle 100 con Avenida Suba no colapsó ni está en riesgo”. Y a renglón seguido señaló que “se presentó un daño en una formaleta, una estructura utilizada para fundir los materiales con los que se construye el puente”.
La emergencia se presentó específicamente en la intersección de la Calle 100 con Avenida Suba. Este puente hace parte de las obras que se vienen adelantando para la troncal de TransMilenio de la Avenida 68, que servirá como alimentadora de la primera línea del Metro de Bogotá.
El director del IDU, Orlando Molano, también se refirió frente a lo ocurrido: “No colapsó el puente, ni la estructura del mismo, es simplemente el carro de desmonte, la formaleta, con la que se funde el puente, y se desniveló una de las diferenciales, se movió más rápido, y por eso se descolgó la formaleta, eso fue lo que pasó. Nunca hubo riesgo de las personas, no hay ninguna persona herida, nunca hubo riesgo del puente”, aseguró el director del IDU, Orlando Molano.
La semana pasada, Molano encabezó un recorrido por las obras sobre la calle 100, entre las carreras 65 y 48, donde se construye nueva infraestructura para el funcionamiento de TransMilenio en la troncal de la avenida 68.
“Las obras continúan, estamos revisando este avance, hablando con el contratista, con la interventoría y revisando cómo podemos adelantarnos, ya hemos tomado algunas decisiones, y esperamos muy pronto tenerles noticias”, dijo el funcionario días atrás.
En 1.06 kilómetros habrá nuevos carriles para el transporte público y mixto; estaciones, espacio público, ciclorruta, un deprimido y un puente vehicular que mejorará los tiempos de desplazamiento, en una infraestructura adecuada y organizada para el transporte público y particular.
Según explicó el IDU, esta obra ya está por encima del 40 por ciento de ejecución, va 3 por ciento por encima de lo programado. Más de 240 personas trabajan en la obra, la cual también cuenta con implementación de tecnología y maquinaria de punta.
El puente vehicular será de uso exclusivo para los buses del sistema TransMilenio, contará con dos carriles en una longitud de 349 metros y conectará el sur con el norte, sobre la avenida Suba. El deprimido se construye en la intersección de la avenida Suba con calle 100 y también será de uso exclusivo de las rutas del sistema de transporte masivo en sentido norte-sur.
El proyecto cuenta con una inversión de más de $257.169 millones y es ejecutada por la constructora Conconcreto. Su etapa de obra inició en febrero de 2021 y finalizará en febrero de 2026.