Alejandro Botero, hace más de una década, fue uno de los principales denunciantes del llamado Carrusel de la Contratación en Bogotá durante la alcaldía de Samuel Moreno. Botero aportó información y pruebas que permitieron destapar una olla podrida en la capital del país.
Ahora Botero está prendiendo las alarmas ante posibles hechos de corrupción en el Gobierno Petro, concretamente en la Aeronáutica Civil (Aerocivil). En su cuenta en X, señaló este jueves: “En la Aerocivil está pasando de agache corrupción más grande que la Unidad de Riesgo, roban y amañan licitaciones para gente sin experiencia y además modifican sin vergüenza los pliegos, saltando toda la ley de contratación”.
Botero se refirió a un proceso que tiene como finalidad el “mejoramiento de las plataformas de viraje, franjas de seguridad, sistemas de drenaje, mejoramiento y construcción de calles de rodaje del aeropuerto Almirante Padilla de Riohacha”, por un valor de 59.400 millones de pesos.
SEMANA revisó la denuncia que apunta a que, al parecer, la Aerocivil estaría modificando la experiencia exigida en la licitación, lo cual, presuntamente, benefició a uno de los oferentes. Concretamente, al conformado por las firmas RG Ingeniería SAS, Infraestructura Nacional Ltda. e IMMCA SAS.
Pero no solo. Este medio conoció que las posibles irregularidades también se habrían presentado al adjudicarle al mismo proponente otras licitaciones en Puerto Carreño, por 38.000 millones de pesos, y en Yopal, por 26.000 millones de pesos. Según la denuncia de Botero, “lo más grave es que en Riohacha y Puerto Carreño le pusieron al mismo interventor para que los ayudara. Mucha casualidad que haya mismo contratista y mismo interventor en dos proyectos”.
Otra licitación en la mira es la de Tolú, por 129.000 millones de pesos, para el mejoramiento y la construcción de la pista, plataforma, franjas de seguridad y obras complementarias del aeropuerto Golfo de Morrosquillo.
“En este proceso, en la etapa de audiencia de adjudicación, ya con los sobres económicos abiertos y con la TRM definida, el oferente 10 pide a la entidad que se revise de nuevo la experiencia del oferente 2, donde la entidad le da traslado por cinco días, devolviéndose en las etapas y dando como resultado final la eliminación de este oferente. Esto a pesar de que esta observación ya había sido realizada en la etapa de observaciones al informe preliminar, donde fue resuelta por la entidad a favor del oferente 2”, dice una de las denuncias de Botero, conocidas por SEMANA.
En el caso de Tolú, la licitación se la ganó el oferente conformado por las firmas Sonacol SAS, Constructora LHS SAS y KMA Construcciones SAS.
“Presidente, tanto habla usted de la transparencia y de su rectitud. No parece nada verdad. La corrupción en la Aerocivil parece de los años ochenta, todo a las malas y a dedo, sin cumplir la ley, 230.000 millones de pesos”, sostuvo Botero.
Botero les pidió a los organismos de control que investiguen las actuaciones del director de la Aerocivil, Sergio Paris Mendoza, y de los funcionarios Andrés Arboleda Salazar, Marco Gutiérrez y Sandra Gómez Acero, en estas licitaciones.