La vicepresidenta y canciller Marta Lucía Ramírez realizó un fuerte pronunciamiento por el panorama que están viviendo varías regiones del país con un plan pistola orquestado por el Clan del Golfo, amenazando a miembros de la Policía Nacional.
Sobre ese escenario que tiene en alerta a las autoridades, la alta funcionaria envió un mensaje al presidente electo, Gustavo Petro, para que le dé claridad al país y evite que el Estado claudique a los macabros intereses de organizaciones criminales.
A través de su cuenta de Twitter, la vicepresidenta y canciller alertó que, al parecer, existen varias voces que le estarían proponiendo a Petro estrategias que podrían poner en alto riesgo los cimientos de la democracia.
“Mientras se acrecienta plan macabro contra la policía, parecería que algunos proponen al presidente electo la claudicación del Estado y la sociedad ante el crimen organizado y narcotráfico, que amenaza cimientos de nuestra democracia. Es importante que él aclare que no será así”, trinó Ramírez.
Otro asesinato de una patrullera, ¿qué está pasando?
La Policía Nacional confirmó el fallecimiento de la patrullera Luisa Fernanda Zuleta, quien fue lesionada con arma de fuego en medio de un ataque terrorista protagonizado por los sicarios del Clan del Golfo en el municipio de Yarumal, Antioquia.
Ella luchó por su vida durante 24 horas en una unidad de cuidados intensivos de Medellín, luego de ser víctima del plan pistola cuando patrullaba las calles de esa población del norte del departamento. En esa misma acción terrorista murió el policía que la acompañaba.
De acuerdo con el reporte de la institución, el hostigamiento que les produjo la muerte ocurrió a las 2:30 p. m. del sábado en el barrio Santa Matilde. Estando en su motocicleta, fueron emboscados por hombres armados de esa organización delincuencial.
La otra víctima mortal fue identificada como el subteniente Sergio Yepes Páez. Ambos acudieron al sitio del homicidio luego de recibir una llamada telefónica donde un ciudadano advertía sobre una presunta irregularidad en las calles de Yarumal.
No obstante, el comandante de la región seis de la Policía Nacional, brigadier general Gustavo Franco, aseguró que las pruebas recolectadas por los investigadores dan la certeza de que los cabecillas de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) ordenaron el ataque.
Para dar con el paradero de los autores materiales de esta acción terrorista, que profundizó la situación de la fuerza pública en Antioquia, la institución está dispuesta a pagar hasta 50 millones de pesos por información que dé cuenta de la identidad y ubicación de los sicarios.
Mientras que dará diez millones de pesos para desvertebrar el grupo de informantes que le está dando cuenta al Clan del Golfo sobre los movimientos de la Policía y el Ejército en el departamento. Ellos son denominados dentro de la organización como ‘puntos’ o ‘postes’.
Al parecer, los ilegales que integran la red del plan pistola en Antioquia están recibiendo grandes sumas de dinero. Tal como ocurrió en la época más sangrienta de Pablo Escobar en Medellín, están entregando cinco millones a cambio de la muerte de un uniformado.
El comandante Gustavo Franco alertó que “hemos puesto todas nuestras capacidades técnicas, humanas y de investigación criminal para determinar quiénes son los autores de este hecho y lograr su captura, así como lo hemos hecho en otros eventos que ha afectado la integridad de nuestros hombres”.
Con base en las estadísticas de la Fiscalía General de la Nación, hasta el 14 de julio de este año, en Colombia fueron asesinados 50 miembros de la fuerza pública. 30 de esos homicidios se ubicaron en las subregiones de Antioquia, sobre todo en Urabá y el Bajo Cauca.