Un fuerte cruce de trinos se registró este lunes, 14 de octubre, entre el presidente de la República, Gustavo Petro, y el exmandatario Álvaro Uribe, luego de que el jefe de Estado acusará al líder del Centro Democrático de atacar a los trabajadores de Colombia.

Este fin de semana Uribe Vélez volvió a cargar contra la reforma laboral presentada por el Gobierno Petro, asegurando que le está creando un problema enorme a la pequeña empresa. Además, se refirió a los artículos aprobados hasta el momento en el Congreso de la República.

El exmandatario manifestó, de forma tajante, que “el contexto es inadecuado para esta reforma”, teniendo en cuenta que se “han cerrado más empresas que en la pandemia y ha disminuido la creación”. Así mismo, se refirió al recargo por trabajo nocturno, por dominicales y festivos y la discusión frente a convertir el trabajo de aprendizaje en un contrato de trabajo.

Esto parece que no cayó muy bien en el jefe de Estado, que a través de una publicación en sus redes sociales escribió: “No se porqué Uribe ataca a las y los trabajadores de Colombia. En su vida de hacendado tuvo un problema laboral con los trabajadores de una de sus haciendas y todo terminó en la muerte de muchos”.

Esto desató el enojo del exmandatario colombiano, quien, de forma enfática, le respondió por la misma vía: “Respete Presidente Petro que mientras usted delinquía, yo trabajaba”. Uribe Vélez, en su publicación contó la historia de la Hacienda San Cipriano-La Mundial, en el nordeste de Antioquia.

Uribe explicó que la hacienda “era una de las principales productoras de panela del departamento. Mi padre y mi familia tenían la mitad y yo, quien la manejaba, la otra mitad. La FARC presionó al Sindicato hasta volver inviable la empresa. La entregué a los trabajadores”.

“La entrega y la escritura se hicieron en junio de 1979. La finca se avalúo en 20 millones de pesos y todas las obligaciones con los trabajadores en 6 millones. El saldo nunca se cobró, se les regaló expresamente”, contó el líder político.

Al tiempo, recordó que “todo se hizo en la Regional del Trabajo. La máquina de caña tenía motor eléctrico, de ACPM, molino y pelton de agua. Había 18 casas de trabajadores, 40 mulas paneleras, escuela, carreteras y caminos”.

El líder del Centro Democrático recordó que antes de ser elegido presidente de Colombia, la guerrilla publicó en Europa que él había asesinado a los sindicalistas para recuperar la finca, lo que calificó como “falsedad”.

“Su publicación lo pone a usted como parte de esa coartada. Más tarde un vaquero que quedó en un pedazo de ganadería fue asesinado por los paramilitares. Como de otros sitios de allá también tuvo que salir mi familia”, concluyó el exmandatario.

Sin embargo, Petro volvió y respondió al exmandatario que “hacer revoluciones no es delinquir, pero matar revolucionarios por la espalda, a sangre fría y por simple odio, sí”. Antes, había señalado que “mientras sus trabajadores con hambre en el estómago le daban riquezas a usted, yo trataba se hacer una revolución para evitarlo”.

“En este mundo el hacendado que aún ve en sus trabajadores, esclavos negros, no tiene futuro. Lo invito a una revolución: la revolución de la equidad social y la democracia profunda. La revolución de la vida”, escribió Petro en una nueva respuesta a Uribe.

En un primer mensaje, tras vincular a Uribe por la muerte de los trabajadores de una de sus hacienda, Petro señaló que “el capitalismo salvaje del siglo XIX ya no es viable en el mundo. Las empresas en la época de la inteligencia artificial solo se sostendrán si el mercado aumenta, y el mercado aumenta solo sobre la base del crecimiento del salario real”.

Así mismo, aseguró que Uribe “parece adorar el mundo de Dickens, de niños explotados de la Inglaterra del siglo XIX. El buen desarrollo de Colombia implica, una repartición adecuada de la tierra para hacerla producir, la universalización de la educación superior pública y de calidad y salarios reales que generen dignidad”.

Finalmente, señaló: “Parece que el uribismo simplemente es una expresión de la vida hacendaría improductiva, que no es la misma del campesino labrador, y atrasada y no de la modernidad de la producción, la industrialización de nuevo tipo y los sabores de vanguardia”.

El presidente Gustavo Petro cargó contra Álvaro Uribe por oponerse a su reforma Laboral. | Foto: Captura de pantalla