María Gabriela Trompetero es una investigadora y docente venezolana, candidata al doctorado en sociología en la Universidad de Bielefeld, Alemania, que ha estado al tanto de la situación de su país en medio de la convulsión social que se generó, luego del fraude en las elecciones en las que supuestamente ganó Nicolás Maduro.
Trompetero, experta en fenómenos migratorios, considera que si la situación no mejora en las próximas semanas, podría generarse una nueva migración masiva de venezolanos hacia otros países, pasando especialmente por Colombia.
SEMANA: ¿Cómo está viendo la situación en Venezuela?
GABRIELA TROMPETERO: Estamos ante una situación bastante grave. El contexto electoral venezolano había sido sin garantías, no había sido libre ni justo, especialmente en temas como la inhabilitación de María Corina Machado, persecuciones, detenciones arbitrarias y que se le haya impedido a más de 5 millones de personas venezolanas en el extranjero ejercer su derecho al voto. Recordemos que el CNE no es un órgano independiente, su presidente Elvis Amoroso es un antiguo diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela. Ocurrió algo muy interesante y es que justo antes de que el CNE emitiera su comunicado, los testigos y votantes se quedaron en los centros para defender los votos y estar presentes en el conteo manual. En redes sociales salieron una masividad de actas donde indicaban que Edmundo González ganaba por una diferencia enorme.
Después del mediodía empezamos a observar cacerolazos espontáneos y que la gente empezó a salir a las calles. Lo que marca diferencia en este contexto es que estamos viendo que estas protestas se están dando en sectores populares en antiguos barrios del chavismo, como el 23 de enero, donde antes no habíamos visto este tipo de protestas tan masivas en contra del chavismo.
El régimen empezó a utilizar su brazo más sanguinario, autoritario. Se reportan, según Foro Penal, seis muertes, pero según fuentes extraoficiales, ya estamos hablando de más de 16. Foro Penal indica que han habido más de 130 encarcelamientos, que ellos habían verificado. Incrementa el actuar autoritario del régimen de Nicolás Maduro. Vemos a la Asamblea Nacional con Jorge Rodríguez también apoyándolo con un mensaje muy confrontacional contra María Corina Machado y Edmundo González, diciendo que los van a encarcelar.
SEMANA: ¿Está convencida del fraude electoral?
G.T.: Cien por ciento. Plenamente convencida. Ese resultado es imposible. Los especialistas están revisando los datos, que mostraron ese día, son incongruentes. Ellos mostraron una gráfica y, cuando sumas los porcentajes, da más del 100%, es decir, es una trampa que ni siquiera están haciendo bien. No han mostrado las actas, está caída la página del CNE y por eso la presión tan grande de gobiernos de la región. (Luis Gilberto) Murillo acaba de volver a decir que tienen que publicar las actas, que deben ser revisadas por entes independientes. Estoy 100% segura de que fue fraude.
SEMANA: ¿Cuáles son las diferencias que se han registrado en estas elecciones en comparación a las anteriores con Maduro?
G.T.: La oposición está muy unida. La molestia del pueblo venezolano es contundente, las protestas en zonas populares. A diferencia del contexto de Guaidó, aquí hubo un proceso electoral, antes la defensa del gobierno interino se basaba en la Constitución, esto originó una serie de cuestionamientos luego de que se “autoproclamó”, en cambio, ahorita fue un proceso electoral. Era la única manera que tenía, constitucionalmente, el pueblo venezolano de expresar su deseo político.
Maduro no tiene casi aliados internacionales en este momento, solamente ha reconocido el resultado Cuba, Nicaragua, Rusia, esos países que no tienen ningún tipo de legitimidad democrática. En la izquierda creo que el más contundente ha sido Boric, México sigue teniendo una posición bastante compleja jugándose la autodeterminación de los pueblos, acaba de pronunciarse la presidenta electa de México con un discurso bastante problemático, a mi parecer, porque ella dice que hay que dejar que los venezolanos decidan sobre ellos. Y por parte de Colombia supongo que sigue intentando no quemar el puente con Maduro y por eso no termina de tener una postura más frontal, pero ya se está exigiendo que el CNE muestre todas las actas.
SEMANA: ¿Cómo evalúa la posición del gobierno colombiano en cabeza de Gustavo Petro?
G.T.: Yo he sido muy crítica del Gobierno colombiano. Desde el principio lo advertí con un colega en una columna cuando empiezan las relaciones del gobierno de Petro y de Maduro, con estos dictadores hay que tener mucho cuidado, no hay que darles un cheque en blanco. Recordemos que en este proceso de acercamiento no fue solo el económico, también utilizaron narrativas del gobierno venezolano, como que la migración venezolana es por culpa de las sanciones, incluso llegaron a decir representantes de Colombia que los venezolanos se estaban regresando en el marco del establecimiento de relaciones. Ahorita participé en un evento en España y el embajador colombiano decía que los venezolanos salían por las sanciones y por la ruptura de relaciones, sabiendo que esa no es la principal salida de refugiados venezolanos. Le dieron oxígeno al régimen de Nicolás Maduro.
Si bien era importante el restablecimiento de relaciones para que hubiese consulados de lado y lado, le dieron oxígeno. En el contexto actual, creo que le ha faltado contundencia, pero me puedo imaginar que al ver que ayer el Gobierno de Maduro expulsó a la representación diplomática del Gobierno de Chile, Colombia está tratando de no quemar el puente, pero siguen exigiendo las actas.
Maduro se está quedando con relaciones con gobiernos de dudoso corte democrático, como en el caso boliviano.
SEMANA: ¿Qué podría pasar en los próximos días?
G.T.: En definitiva va a escalar la violencia, va a escalar el músculo represivo del gobierno de Maduro, la gente, lo que escuchas, lo que ves en las distintas manifestaciones es que no tienen miedo, van a seguir en las calles hasta que no se respete su voluntad que este caso está siendo violada con un fraude masivo. Estoy muy preocupada por las declaraciones de Jorge Rodríguez en la Asamblea Nacional, en donde dice que hay que encarcelar a María Corina Machado y a Edmundo González.
En líneas generales, me preocupa la escalada de la violencia. Temo por los defensores de derechos humanos en Venezuela, por los testigos y los manifestantes. Hemos observado en distintos videos qué están deteniendo a jóvenes en zonas populares, por ejemplo, en el 23 de enero, un barrio popular venezolano, antiguo bastión del chavismo. La situación es muy grave.
En los hospitales tengo fuentes que indican que los tiros, las heridas de bala son a matar, cerca de la aorta, del corazón, realizadas por expertos para matar, entonces sí es bastante complicado. Las declaraciones del chavismo lo que nos demuestran es que ellos no están dispuestos a ceder, lamentablemente.
SEMANA: ¿Con lo que está pasando en Venezuela se podría generar otro fenómeno migratorio?
G.T.: Sí, totalmente. Lo digo por dos cosas. Primero, empíricamente, según una encuesta de Meganálisis de mayo de 2024, un 41 % de las personas consultadas consideraron que migrarían de no darse un cambio político en Venezuela o tendrían intención de emigrar si no se diera el cambio político en las elecciones. Otra muestra de la importancia del tema migratorio se observó durante la campaña María Corina Machado con Edmundo González, tú veías las pancartas, el desespero de la gente estaba muy vinculado al tema migratorio, a una última esperanza antes de irse del país. También el deseo de que vuelvan quienes se fueron, eso fue algo también muy notorio y nuevo en el contexto de campañas electorales en Venezuela, ese rol principal de la migración tanto por los electores como para María Corina Machado y Edmundo González como promesa de campaña.
Por último, además de que continúa la emergencia humanitaria compleja en Venezuela, este contexto actual de autoritarismo, de represión, persecución, encarcelamiento, violación de derechos humanos va a generar un éxodo cuyos afectados son sujetos de protección internacional, mecanismo que no se está utilizando lo suficiente en la región para brindarle protección a las personas venezolanas
Algunos países de la región han ido girando hacia políticas de cierre, incluso Colombia no ha abierto un nuevo periodo para que los venezolanos puedan acceder al Estatuto Temporal de Protección para Migrantes Venezolanos (ETPV). Por ello, las personas migrantes van a buscar rutas migratorias peligrosas hacia los Estados Unidos, a través del Darién. Según las cifras de Migración Panamá, desde enero de 2023 a mayo de 2024, 438.500 personas venezolanas han pasado por la peligrosa ruta, esto va a aumentar si no hay un cambio político en Venezuela.
Evidentemente, un cambio político no va a generar un cambio en todas las condiciones de Venezuela de manera rápida, va a demorar. No obstante, el cambio en la dirección política le ofrece a las personas una perspectiva de mejoras en el área económica, en el sistema de salud, educativo en el mediano y largo plazo. Esto reduciría la intención migratoria y generaría que muchos venezolanos regresaran a su país. Si la situación actual no se resuelve a favor de la democracia, la migración va a aumentar considerablemente y estaremos frente a un nuevo éxodo como el del 2017.