En la Casa de Nariño, el secretario de Transparencia, Andrés Idárraga, rompió su silencio sobre las amenazas de muerte que recibió el lunes de esta semana, con el envío de una corona fúnebre con el mensaje “descansa en paz”, el cual llegó a su residencia.
En su declaración, el alto funcionario de la Casa de Nariño reveló un sorpresivo dato, al poner de presente que le tocó pagar el corona fúnebre que llegó a su casa con la amenaza de muerte, porque el paquete —según explicó— era contraentrega.
“Me avisan que llega un arreglo floral, donde se dice que Andrés Idárraga descansa en paz. Tenemos una información muy vaga. Afortunadamente hoy llamo a una persona a hacer un pedido de un arreglo floral. Le solicitan al domiciliario que lo lleven y que allá le paguen el arreglo. Efectivamente eso ha sucedido. Tuve que pagar 165 mil pesos por el arreglo que me mandaba descansar en paz”, dijo el secretario de Transparencia.
También señaló: “Pagamos mi propia amenaza. Ya la segunda de estas que volvieran en función de este cargo. Y nos preocupa porque sobre todo estamos detrás de mafias corruptas. Y cuando hablo de mafias corruptas estamos hablando de narcotraficantes asociados a corrupción, contrabandistas asociados a corrupción. Y esto ya está en un punto que desafortunadamente nos llama a decir, bajémonos el tono a la polarización política y juntémonos todos a nivel nacional en contra de los corruptos para acabar con esto. Secretario, usted habló con el presidente hoy”.
Sobre su seguridad, Idárraga señaló que la revisión del mismo lo están haciendo las autoridades pertinentes, con el objetivo que refuercen las medidas.
“Pues en materia de seguridad el propio general Salamanca está disponiendo desde el día de ayer todas las especialidades de la policía para poder tomar los refuerzos que sean necesarios. Pero a mí me preocupa esto que les he mencionado hace poco. Tenemos un poco más de mil solicitudes a órdenes de control, contralorías, fiscalías, de las cuales casi 1.100 solicitudes no tenemos escasamente 50 o 60 respuestas. Entonces en dos años del trabajo de la Fiscalía es muy difícil que en la contraloría, que la Fiscalía, la Procuraduría, la Secretaría de Transparencia le manden los oficios, le manden los traslados y ni siquiera se tenga la delicadeza de responder”, anotó.
Y expresó: “Entonces llamamos respetuosamente a la justicia, que mientras la Secretaría de Transparencia hace su trabajo necesitamos que la justicia —por el bien de los denunciados— y de los denunciantes se sepa a fondo qué está pasando con los casos de corrupción sobre los cuales hemos venido a libertar”.
“Que investigue delitos contra la administración pública en casi 300 casos. A la Procuraduría lo mismo por presuntas faltas disciplinarias de funcionarios públicos vinculados a casos de corrupción en temas, por supuesto, de administración de los recursos públicos que superan las 600. A las contralorías municipales, contralorías departamentales y a la General de la Nación también le he pedido casi 300 solicitudes de casos de posibles casos de incidencia, de hallazgos fiscales con incidencias distintas, penales o disciplinarias”, anotó el secretario de Transparencia.
Finalmente, admitió que la amenaza de muerte es un hecho delicado que atenta contra su integridad, pero aclaró que por ese hecho no saldrá del país.
“No, pues el miedo existe, pero es que el miedo es el que hace que los corruptos sigan haciendo de las suyas. Entonces, con miedo, seguimos avanzando, preocupados por la seguridad, pero confiamos en que las instrucciones del Estado sigan protegiendo”, dijo.