La senadora Angélica Lozano hizo un llamado para que su proyecto en el que propone que los ladrones que roban objetos de baja cuantía terminen en la cárcel sea discutido. La idea sale a la luz en medio de los atracos que se han vivido en los últimos días en Bogotá.
Según dijo la congresista, con esto busca atacar unos 15 delitos que impactan directamente a los ciudadanos, como el hurto en sus distintas modalidades y las lesiones personales. “Con nuestro proyecto haremos que la justicia sea rápida y que las víctimas sean reparadas”, afirmó.
Lozano puso de precedente que las cifras reflejan que se trata de un panorama “alarmante”. Por ejemplo, en el 2023 solo hubo condenas relacionadas a hurto simple en un 0,7%. En el caso de hurto calificado fue de 1,6%. El panorama es tan dramático que por estafa solo se lograron dos condenas de 81 mil denuncias que llegaron a la Fiscalía.
Una de las propuestas del proyecto es que se aceleren los procesos judiciales para que la Fiscalía pueda priorizar estos casos y que los jueces requieran de menores audiencias para emitir las condenas.
“Estamos cansados de escuchar casos de policías que capturan a los ladrones y no pasa nada porque los sueltan al otro día. Como esos delincuentes no son condenados, los ladrones quedan sin antecedentes”, aseguró Lozano.
La senadora de la Alianza Verde dice que uno de sus propósitos es que se acabe con la excarcelación de los delitos que hoy en día no tienen cárcel, como lo son los robos de menos cuantía de hasta cuatro salarios mínimos. Lozano asegura que lo llevará hasta los 10 salarios. Además, que tendrían que hacer trabajo social no remunerado.
Lozano afirmó que si su proyecto se aprueba, las personas podrían tener un arresto hasta por seis meses y que esto sería en unos centros especiales llamados Centros de Retención para la Transformación Social y la Seguridad Ciudadana (CERTS) que se crearían con la aprobación del proyecto y que son diferentes a una cárcel convencional.
“Hoy quien comete uno de estos delitos se va para la casa. Pero no queremos crear nuevas ‘picotas’ o ‘modelos’, sí un lugar para que quien cometa un delito por primera vez tenga privación de su libertad. Es decir, no irá a cárceles donde escalan en la ‘universidad del crimen’”, dijo Lozano.
Además, recordó que lleva año y medio trabajando en este proyecto y que, aunque tiene buen ambiente en el Congreso, el Gobierno se estaría oponiendo a la iniciativa porque mantiene su idea de la ‘paz total’ y de la humanización en la que quiere evitar a toda costa más gente tras las rejas.
La iniciativa ya fue aprobada en primer debate de la Cámara de Representantes, sin embargo, le faltan tres debates y corre el riesgo de que se termine hundiendo, ya que ese trámite debe surtirse antes del 20 de junio.
“La seguridad y la justicia son hermanas. Es clave tener nuevas herramientas como las que da este proyecto, para que no sigamos en el reino de la impunidad de los delitos que más impacto tienen para los ciudadanos”, dijo Lozano.
El proyecto vuelve a tomar relevancia en medio de los constantes casos de robos, atracos y sicariato que se han registrado especialmente en Bogotá. Este miércoles 21 de febrero unos sicarios asesinaron al empresario Hernán Roberto Franco, hermano del exdirector de la Dian, Óscar Franco Charry, en un edificio conjunto al parque de la 93.
Igualmente, en los últimos días se han registrado atracos a varios restaurantes del norte de la capital, lo que tiene a los ciudadanos alarmados por los constantes robos y la inseguridad desbordada.