La senadora Andrea Padilla lideró un debate de control político al Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Transporte y el ICA sobre las condiciones de transporte de animales vivos en Colombia.
La congresista animalista convocó a esas entidades del Estado a la Comisión Quinta del Senado para evaluar el cumplimiento de una resolución expedida en 2022 que regula los parámetros bajo los que deben transportarse aves, cerdos, bovinos y otros animales que son utilizados para el consumo humano.
Más que un debate animalista, se trata también de una discusión de salubridad, pues el manejo que se les da a estos animales en los criaderos, el transporte a los mataderos y la gestión a esos seres vivos en esos lugares donde son sacrificados influye en la calidad con la que llega la carne al plato de comida de los ciudadanos que la consumen.
“Todo mundo ha visto por carretera estos camiones atiborrados de animales, fracturados, asesinados. Es una cosa absolutamente normal, como comer carne. Pero desde el 2022 se expidió la Resolución 006915 que es el manual de transporte de animales en pie por vía terrestre, en su mayoría rumbo a los mataderos”, aseguró la senadora Padilla.
La congresista animalista agregó que “nos preocupa que a seis meses de entrar en vigencia este manual sentimos que todavía no hay una adecuación institucional. Es un tema de difícil control porque presenta sus infracciones más brutales en carretera, por lo que requiere una preparación compleja”.
La información presentada en el debate de control político indicó que millones de aves, bovinos y cerdos llegan mutilados, con fracturas o muertos, en medio de los procesos de despoblación de las fincas, carga en los camiones y descargue.
Por ejemplo, procedimientos que se hacen sin rampas para que los animales desciendan de los camiones o en los que los trabajadores los suben y bajan desde estos a la fuerza usando elementos cortopunzantes para chuzarlos y obligarlos a moverse.
“No tienen las adecuaciones, de manera que si hace un sol feroz, se queman; si llueve, se emparaman. Los pisos no tienen adecuaciones y, si hay un frenón, los animales se chocan los unos con los otros, caen, otros les caen encima y ya no se pueden volver a levantar. Invito a la gente a que se ponga en el lugar de esos animales a ver si nos gustaría viajar en esas condiciones, estamos hablando de distancias que van de 8 a 15 horas”, llamó la atención la senadora Padilla.
Desde la perspectiva de los animales, como productos alimenticios para el consumo humano, este tipo de situaciones están relacionadas con la salubridad en la producción de la carne porque la misma pierde calidad.
La senadora Esmeralda Hernández mencionó, en el marco de ese debate, que desde 1989 el Estado colombiano pidió no tener prácticas que hirieran a los animales en el proceso de producción (tenencia y transporte) y cuestionó la falta de información pública sobre las condiciones del transporte.
“Son sometidos a condiciones de hacinamiento, muchos de ellos mueren por asfixia, muchos de ellos sufren fracturas porque se atacan entre ellos, se resbalan, porque la infraestructura del camión y de las carreteras no son las mejores. Permanecen de pie durante largos períodos, sin tomar agua y sin comer. Miremos cuántas son las vidas que sufren esto cada año en el país de cuenta del consumo de proteína animal”, aseguró la senadora Hernández.
En medio del debate, la ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, aseguró que esa cartera y el Ministerio de Ambiente alistan un decreto y una resolución sobre condiciones de bienestar animal y dijo que el Gobierno trabajará en torno a “la cultura” que está alrededor de este tema, que incluye a productores de animales para consumo humano y a los trabajadores.
La senadora Isabel Zuleta comentó que ha detectado casos de sacrificios de animales que se hacen al borde de las carreteras. Alrededor de 30 millones de animales, solo entre bovinos y porcinos, son transportados al año en Colombia.