Luego de que el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, desatara una fuerte controversia al señalar que los gobernadores del país convirtieron la seguridad en las regiones en un tema electoral, el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, arremetió en contra del funcionario y le pidió que se tome en serio su cargo.
Velasco cree que algunos gobernadores, más allá de sus preocupaciones por los problemas de seguridad en sus regiones, actúan por la época electoral.
“No me parece prudente que los gobernadores, en período electoral, algunos de ellos con candidatos propios, quieran convertir ese tema, que debe ser nacional, en un tema electoral”, dijo el ministro en una conferencia de prensa este miércoles 16 de agosto en el Congreso.
¿Está queriendo decir que los gobernadores hacen política?, le preguntó un periodista.
“No, los gobernadores no hacen política, ellos lo que hacen es administrar los recursos para poder desarrollar las cosas de su región”, respondió el ministro.
Velasco, visiblemente molesto, le dijo: “Ah, es que no hay ningún gobernador que no tenga su corazoncito y no tenga su candidato. Hombre, dejemos de ser hipócritas y hablemos las cosas claramente. En este país, quienes estamos en la actividad política, tenemos nuestro corazoncito y cada uno de nosotros empujará para algún lado. Yo les pido a los gobernadores que el tema de la seguridad, más que un tema electoral, sea un tema de debate electoral pausado, porque esta responsabilidad es de absolutamente todos”.
Tras estas declaraciones, el gobernador Nicolás García le respondió enfáticamente al ministro Velasco: “los ciudadanos, campesinos, y policías muertos, los atentados, el recrudecimiento de la violencia, las masacres y alertas de Naciones Unidas y otros organismos son reales” dijo. A renglón seguido, señaló de manera tajante: “Sea serio y tómese en serio su cargo, esas vidas dependen de usted”.
El mandatario departamental indicó además: “Desde las regiones le pedimos a usted, ministro Luis Fernando Velasco, que se tome el tema de seguridad en serio, que lo haga prioritario, que se ponga los pantalones, que evite más muertes y evite el sufrimiento de muchas familias o dé un paso al costado y deje que alguien lo haga”.
Por su parte, el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, uno de los más críticos con el gobierno de Gustavo Petro, le pidió la renuncia después de llamarlo “incompetente”.
“Un incompetente ministro de gestión gris, ante el llamado de los gobernadores alertando sobre la grave situación de seguridad en el país, sale a responder que el tema es electoral. Sea serio, ministro, no les falte el respeto a los colombianos. Los muertos, las masacres y los atentados son reales, aquí el único hipócrita es usted. Renuncie”, le expresó.
Y es que los gobernadores del país, a través de la Federación Nacional de Departamentos (FND), emitieron un comunicado en el que le reclamaron al Gobierno nacional que no los están escuchando.
“Con enorme desasosiego, los gobernadores de Colombia alzamos -nuevamente- nuestras voces para expresar que, a pesar de nuestros esfuerzos, sentimos cada vez más agotados los canales de comunicación con el Gobierno nacional para lograr que se escuche la voz de las regiones”, reclamaron.
Dijeron que la relación con la Casa de Nariño es fundamental para tomar decisiones efectivas que permitan frenar el accionar violento de los grupos armados ilegales que, según ellos, “se han fortalecido en los territorios al amparo de las improvisaciones y vacíos de la paz total”.
Asimismo, afirmaron que las carreteras y poblaciones del país se están viendo afectadas por “violentos bloqueos y anarquía” y que se están vulnerando los derechos de las personas. “Los delincuentes intimidan, amenazan y atacan a la población civil. Día tras día, aumentan las dolorosas cifras de asesinatos de miembros de nuestras Fuerzas Militares y de Policía”, afirmaron.
Los gobernadores cuestionan que ante ese panorama oscuro, ¿cómo se podrán garantizar las elecciones transparentes y seguras y cómo se podrá seguir hablando de paz?
“Los departamentos y municipios vemos con desesperanza la actitud del Gobierno nacional de hacer oídos sordos. A pesar de nuestros llamados, nuestra voluntad de articulación, nuestros intentos de trabajo en equipo, la única respuesta ha sido una actitud de desconocimiento a las autoridades territoriales y locales y al rol de voceros institucionales legítimamente elegidos por el pueblo”, aseguraron desde la FND.