La idea de que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, vaya a ser garante de los diálogos entre el gobierno colombiano y la guerrilla del ELN no cayó bien en los Estados Unidos. En el Congreso de ese país se manifestaron en contra.

Uno de ellos fue el senador Bob Menendez, del Partido Demócrata. “La realidad es que lo que está garantizando Maduro en este momento es darle refugio al ELN para hacer actos de terrorismo contra Colombia. No entiendo esa postura como algo que sea positivo para Colombia. En los acuerdos de paz se ofreció una oportunidad para todos los que querían participar pacíficamente en la sociedad colombiana”, aseguró Menendez.

Por su parte, el senador Marco Rubio dijo: “Sabíamos después de las elecciones que teníamos una nueva administración en Colombia que iba a acercarse un poco más al régimen de Maduro, pero bueno, esa es la decisión de un presidente electo en una nación soberana, no debe afectar ni tener impacto de ningún tipo sobre la política norteamericana. Esos grupos son terroristas responsables por la muerte y asesinato y sufrimiento, no solamente de los colombianos, sino de esta país también”.

La congresista María Elvira Salazar también se pronunció: “Petro le pide a Venezuela ser ‘garante’ en las negociaciones con el ELN en Cuba y Maduro acepta. O sea, un terrorista le pide a un cómplice de terroristas que garantice el diálogo con terroristas en un país patrocinador del terrorismo. ¡Lo único que se garantiza es más terror!”.

Desde la cuenta oficial del senador Jim Rish, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, también se manifestaron en contra. “El presidente Gustavo Petro debería reconsiderar poner la seguridad de Colombia en manos de Maduro, un fugitivo internacional”.

Además de los congresistas estadounidenses, desde la administración del presidente Joe Biden tampoco se mostraron del todo conformes con el anuncio. “La presencia de ELN y otros grupos dentro del territorio de Venezuela es algo preocupante para ese proceso. Creo que lo importante es empujar hacia la democracia en Venezuela”, le dijo a Noticias Caracol el subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols.

El anuncio también generó criticas en el país. El exvicepresidente y exembajador en Estados Unidos Francisco Santos se mostró en contra de esa decisión y alertó que en ese país no caería bien esa posición.

“Se veían venir, me parece que es un diálogo que tiene que ser muy condicionado. No puede ser totalmente entregado porque estamos hablando de una dictadura brutal con la que Petro pretende restablecer relaciones. Es un cambio radical de política exterior que hay que medir el impacto en toda la batalla geoestratégica que hay en América Latina frente a China, Rusia, Irán y Estados Unidos”, le dijo Santos a SEMANA.

El presidente Petro, a través de una carta, le pidió a Maduro ser garante de esas negociaciones. “Como es de su conocimiento, con la activa participación de la República Bolivariana de Venezuela y otros cinco países en calidad de garantes, se firmó en la ciudad de Caracas en marzo de 2016, un acuerdo y una agenda de diálogos con el Ejército de Liberación Lacional, el ELN, así como en el mes de abril de este año, unos protocolos, entre ellos el que contempla el retorno a Colombia de la delegación de diálogo de dicha insurgencia, transitando por territorio venezolano”, se lee en la carta que le envió Petro a Maduro.

El mandatario venezolano, por su parte, respondió que está listo para adelantar ese proceso. “Yo le dije y le estoy diciendo al presidente Gustavo Petro y a Colombia que, una vez más, como lo hizo el comandante Chávez, en su tiempo, para garantizar los Acuerdos de Paz que luego se firmaron, que me tocó participar como garante. Una vez más, presidente Gustavo Petro y a Colombia le decimos que Venezuela acepta el carácter de garante de las negociaciones y de los acuerdos de paz de Colombia con el ELN”, aseguró.