El alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, confirmó este viernes, 24 de noviembre, que aún sigue en el cargo y ya empezó el proceso de empalme con su sucesor, el ahora delegado del Gobierno en la negociación con el ELN, Otty Patiño.
Rueda, quien poco habla con la prensa, conversó corto con los medios de comunicación y rompió su silencio tras su salida del cargo, según lo anunció el propio presidente Gustavo Petro, a través de su cuenta de X, anteriormente Twitter.
“Muy agradecido, muy agradecido, así es la vida, la vida es aportes a un momento de la historia y está muy bien lo que se ha construido”, dijo tras esquivar a los periodistas.
Rueda expresó que todo está dicho en la carta que él escribió dirigida al Gobierno y en la que agradece, entre otros, a los grupos armados con los que dialogó y a los que acercó para hablar de paz desde agosto de 2022, cuando inició las exploraciones.
¿Por qué cree que el presidente desistió de su nombre?, le preguntó un periodista y él se limitó a responder: “Todo está dicho en la carta que escribí”.
¿Ya empezó el empalme con Otty Patiño?, interrogó otro comunicador y él respondió: “Estamos en ese proceso”.
Con Rueda quedaron varias preguntas sueltas, pero él se convirtió en uno de los funcionarios del Gobierno Petro que más guardó distancia con la prensa.
De hecho, fuentes de la Casa de Nariño insisten en que él se convirtió en una rueda suelta que ni siquiera entablaba una comunicación directa y fluida con el presidente Gustavo Petro; menos con el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, o el canciller Álvaro Leyva.
Se desconoce si Rueda seguirá apoyando desde la distancia al Gobierno nacional con los contactos con los grupos armados. Al fin y al cabo, no es secreto que él es la persona que más tiene línea directa con los comandantes del ELN y las disidencias de las Farc de Iván Mordisco y de Iván Márquez.
Tampoco está claro si Otty Patiño seguirá al frente de la mesa de negociación con la guerrilla del ELN, la única que hasta al momento está avanzando, o si, al contrario, se hará a un lado porque sus ojos tendrán que estar en las negociaciones con los elenos, las disidencias de las Farc y las organizaciones de narcotraficantes que operan en varias regiones del país, entre ellas, Buenaventura.
El alto comisionado se caracterizó por no condenar los ataques violentos de estos grupos armados y, en cambio, fue condescendiente. De hecho, aseguró que supuestamente estaba teniendo conversaciones con Iván Márquez, que se encontraba vivo y que estaba en Colombia.
Por varias de sus polémicas, Rueda fue citado al Congreso a debate de control político por el fracaso de la ‘paz total’, una de las principales banderas del gobierno del presidente Gustavo Petro.
Por las declaraciones relacionadas con la presencia de Iván Márquez en Colombia, la Fiscalía lo había llamado a declarar para que diera detalles de lo dicho y si el guerrillero, que tiene orden de captura, estaría en el país.
Hasta la mañana de este viernes, el presidente Gustavo Petro no había posesionado a su nuevo alto comisionado para la paz.