Aunque el Gobierno del presidente Gustavo Petro decidió respaldar a última hora a la senadora Angélica Lozano a la Presidencia del Senado, el barranquillero Iván Name se impuso y se convirtió en el sucesor de Alexander López este 20 de julio.
Aunque se pensaba inicialmente que el espaldarazo de la Casa de Nariño y el lobby del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, arrojaría frutos, no ocurrió. Tampoco sirvió que Lozano obtuviera el mayor número de respaldos en la Alianza Verde y la coalición Centro Esperanza, su casa política, que reafirmó horas antes de la votación, a través de un comunicado de prensa, que ella era la ungida.
En total votaron 105 senadores, de los cuales, 54 lo hicieron por el senador Iván Name y 50 por Angélica Lozano. Un voto fue anulado porque apareció doble.
Name amasó el respaldo de los partidos políticos tradicionales que hoy están distantes al Gobierno del presidente Gustavo Petro y su escogencia se convirtió en un claro mensaje del Senado al palacio presidencial de un nuevo año legislativo marcado por la independencia.
En realidad, la elección entre Name y Lozano se convirtió en una especie de medición de fuerzas entre los partidos políticos independientes y de oposición y el Gobierno de Gustavo Petro, donde el segundo resultó derrotado.
El senador Name fue el último competidor por la Presidencia del Senado en anunciar sus intenciones políticas. Angélica Lozano e Inti Asprilla fueron los primeros en salir al ruedo y, ante las divisiones entre ambos, la tercería de Name se impuso.
Él, consciente de su fortaleza política, aprovechó su cercanía con los partidos de La U, el Conservador y una fracción del Liberal, y empezó a llamar a cada congresista. Su campaña fue sin aspavientos ni grandes anuncios. De hecho, postuló solo su nombre a la Presidencia del Senado y sus compañeros, en silencio, lo respaldaron en las urnas.
Name ―senador durante cuatro períodos consecutivos― fue diputado de Cundinamarca, representante a la Cámara por Bogotá en dos oportunidades. Además, participó activamente en los cambios de la Constitución de 1991. Y en los 90 fue elegido concejal de la capital del país.
Es cofundador y senador de la Alianza Verde. Padre de María Clara Name, una concejal de Bogotá que completa tres períodos consecutivos.
Una de las primeras acciones de conciliación que deberá adelantar el nuevo presidente del Senado es con su propio partido y la coalición Centro Esperanza que no lo respaldó. Recordemos que 8 de 13 senadores votaron este jueves 19 de julio por Angélica Lozano en una elección interna.
El barranquillero tendrá en sus manos el poder de dirigir el Senado en un año crucial para el Gobierno, porque se definirá la suerte de las reformas estructurales del gobierno de Gustavo Petro, un tema que no será fácil porque en menos de tres meses los colombianos elegirán concejales, diputados, alcaldes y gobernadores y el grueso de congresistas estarán en sus regiones empujando a sus candidatos locales. Además, estará al frente de todo el proceso de elección de contralor general y el defensor del pueblo en los próximos meses.