“Matricule su vehículo nuevo en el departamento y reciba un descuento del 50 por ciento en el siguiente año y un 20 por ciento de descuento en el próximo año”. Esa es la campaña que desde hace varios años se ha lanzado desde la Gobernación de Cundinamarca ofreciendo beneficios tributarios para buscar atraer contribuyentes que empiecen a pagar el impuesto vehicular en el departamento.
Aunque dicha campaña está basada en una ordenanza de la Asamblea de Cundinamarca, lo que no estaría bien, a los ojos de la norma, es violar la jurisdicción de cada entidad territorial.
Eso es lo que estaría ocurriendo en Bogotá con una posible injerencia directa en la ciudad de parte de otros municipios que están instalando satélites de trámites de tránsito en la capital del país, lo que podría convertirse en una posible competencia desleal.
Cuando una persona quiere comprar un vehículo, tiene total libertad de decidir dónde lo quiere matricular y por ende a qué entidad territorial quiere pagarle el valor de la matrícula y los respectivos impuestos. Pero en algunas zonas de Bogotá esa libertad estaría siendo cercenada.
SEMANA conoció que municipios como Funza, Mosquera y Madrid, se estarían saliendo de su jurisdicción territorial y funcionarios relacionados con las respectivas secretarías de tránsito están viniendo hasta Bogotá a tratar de lograr un mayor número de matrículas nuevas de vehículos para sus territorios, lo que en últimas va a representar un mayor recaudo tributario para ellos y un menor recaudo para Bogotá.
En ocasiones, muchas de estas matrículas no se hacen directamente en Funza, Mosquera y Madrid, u otros municipios, sino que la hacen desde Bogotá en los concesionarios de carros o motos por medio de una conexión VPN para simular que se está en el municipio.
SEMANA hizo un recorrido por varios concesionarios que están bajo la lupa del Distrito y pudo evidenciar lo que sería una clara violación a la autonomía territorial de Bogotá de parte estos municipios mencionados.
“La moto se entrega con todos los papeles ya lista para rodar. Incluye matrícula, Soat e impuestos. Se matricula en Funza porque la semaforización acá en Bogotá sale un poco más costosa. La verdad desconozco cuánto sería el valor total con la matrícula en Bogotá, pero nosotros la matriculamos es en Funza porque tenemos un convenio con ellos y sale mucho más económico”.
Esa fue la explicación que entregó una asesora comercial de un concesionario ubicado en la localidad de Chapinero, cerca de la estación de la calle 76 de TransMilenio. “¿Pero el comprador tiene que ir hasta Funza a matricular la moto?”, se le preguntó, y su respuesta fue contundente: “no, nosotros se la entregamos ya lista para rodar”.
El mensaje se repite en cada uno de los concesionarios de la zona. “La matrícula es en Funza porque como usted debe saber acá en Bogotá se paga semaforización y en Funza no. Adicional, tenemos un convenio allá donde la matrícula sale más rápido”, dijo otra asesora de otro concesionario, quien al consultársele “¿cuánto costaría matricular en Bogotá?”, su respuesta fue clara: “no sé porque nunca he matriculado en Bogotá, siempre he trabajado con Funza, Mosquera y Madrid”.
Efectivamente, estos concesionarios también tendrían convenios con otros municipios como Madrid. “La matrícula es en Madrid. Tenemos una persona de Madrid trabajando directamente con nosotros”, comentó un asesor de otro concesionario ubicado en la Avenida Primero de Mayo cerca de la Avenida Boyacá.
SEMANA conoció que por lo menos hay más de 12 concesionarios ubicados en diferentes puntos de la ciudad en donde el patrón se repite una y otra vez. Y aunque la mayor alerta proviene en la venta de motos, también hay algunos concesionarios de carros que están aplicando la misma metodología.
De acuerdo con expertos, aunque en la ley no hay norma clara que prohíba matricular vehículos en cualquier municipio, este actuar podría estar infringiendo la Constitución Política de Colombia que establece la autonomía territorial de cada entidad, la Ley 136 de 1994 que establece los principios rectores del ejercicio de la competencia de los municipios, además del Código Nacional de Tránsito que determina que las secretarías municipales de tránsito solo pueden ejercer dentro del área urbana de su respectivo municipio y los corregimientos.
Ahora, más allá de lo que está ocurriendo con esta posible injerencia a Bogotá, el abogado especialista en contratación estatal, Juan José Gómez, quien está ultimando demandas en contra de varias ordenanzas departamentales, le explicó a SEMANA que Cundinamarca no solo estaría ejerciendo una competencia desleal con Bogotá, sino que además estaría propiciando un detrimento patrimonial en los municipios del departamento.
“Los departamentos no tienen la facultad de establecer ese tipo de descuentos frente a cada uno de los municipios porque el municipio es el propietario de ese impuesto, y con esas ordenanzas lo que se está efectuando es un detrimento patrimonial por el porcentaje que dejó de recaudar cada municipio por estos impuestos. Es exceder la competencia que tienen las asambleas y cuando se decreten la nulidad de esas ordenanzas, las gobernaciones van a quedar endeudadísimas con los municipios”, dijo Gómez.
Para el experto, con esta ordenanza es clara la competencia desleal con Bogotá: “es una alteración indebida al mercado que genera todo tipo de efectos. El gobernador tiene competencia frente a la entidad territorial denominada Cundinamarca, pero cada municipio dispone de sus impuestos. Y es en Bogotá donde están todos esos vehículos que se matriculan en Funza, Mosquera y Madrid generando contaminación y demás”.
CIFRAS
SEMANA consultó al Registro Único Nacional de Tránsito (Runt) por el balance de vehículos nuevos matriculados y las cifras hablan por sí solas.
A partir del 2018, dos años antes de la pandemia, comenzó a ser evidente la tendencia al alza de matrículas en otros municipios. Mientras ese año en Bogotá se matricularon 5.542 motos, en Funza lo hicieron 14.913, en Madrid 7.539, y en Mosquera, por su parte, tan solo 26.
Por su parte, en el 2019, mientras en Bogotá la matrícula de motos se redujo 6 por ciento, en Madrid y Funza subieron 10 y 44 por ciento respectivamente. Ya en el 2020, en pleno encierro de la pandemia, en la capital se matricularon 2.101 motos, pero en Funza lo hicieron 16.069, en Madrid 11.810 (subió incluso frente al 2019), y en Mosquera que no pasaba las 50 matrículas, registró 1.792.
Para el 2021 siguió la tendencia. En Bogotá se registraron 2.582 motos, pero en Funza 38.394 (subió 139 por ciento anual), en Madrid 19.105 (62 por ciento más) y en Mosquera 15.422 (760 por ciento más). Y aunque entre el 2022 y 2023 bajaron el número de matrículas por la evidente recesión económica que golpeó al sector, siguió el patrón de más motos matriculadas en otros municipios que en Bogotá.
En lo corrido de este 2024, con corte al 30 de septiembre, en Bogotá se han matriculado 2.314 motos, mientras que en Funza 36.164, en Madrid 17.992 y en Mosquera 12.262.
Ahora, en cuanto a autos, si bien la situación es diferente porque se siguen matriculando más vehículos en Bogotá, si se observa cómo en Funza, principalmente, ha aumentado el total de matrículas llegando a su tope máximo en 2022 con 25.478 vehículos matriculados, lo que representó el 50,5 por ciento del total matriculado en la capital ese año.
Aunque sería difícil calcular con exactitud cuánto dinero ha dejado o va a dejar de recaudar Bogotá con matrículas de motos y carros en otros municipios, pues es complicado determinar cuántos vehículos realmente se fueran matriculados en Bogotá, si por lo menos la mitad de motos que se han matriculado en Funza, Madrid y Mosquera, desde 2018 hasta este año (278.964) lo fueran hecho en la capital, le hubiera significado al Distrito más de 85.000 millones en solo matrículas de motos. Y en carros, alrededor de 34.000 millones de pesos. Eso sin contar los impuestos, más aún cuando el Distrito tiene para este 2024 una meta de recaudo por impuesto vehicular de 1,27 billones de pesos.
El alcalde Mosquera, Nelson Parra, aseguró a SEMANA que el organismo de tránsito del municipio “es de economía mixta y el capital que tiene Mosquera es solo del 30 por ciento, por lo tanto, en su mayoría es capital privado”.
Por su parte, la alcaldesa de Funza, Jeimmy Villamil, y el alcalde Madrid, Carlos Chávez, al cierre de esta edición no habían respondido a SEMANA.