Para el gobierno de Gustavo Petro será difícil conseguir que la reforma a la salud sea aprobada en segundo debate en las sesiones extraordinarias del Congreso convocadas para la semana antes de Navidad.

En ese recinto han sido radicadas 550 proposiciones para el trámite del proyecto que consta de 64 artículos y esa corporación tiene solo hasta la medianoche del 19 de diciembre para sesionar sobre este asunto.

El propio presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, reconoció el complejo camino que tiene el articulado que ha sido la bandera del Ministerio de Salud y que el Ejecutivo está intentando tramitar por tercera ocasión en el Congreso.

“La reforma a la salud difícilmente será aprobada en las sesiones extraordinarias. Mi posición como presidente de la Cámara será dar el debate y no pupitrear nada. En eso coincidimos con el Gobierno. Mejorar el proyecto para que el Senado pueda hacer lo propio es el reto”, sostuvo Salamanca.

El martes, cuando comenzaron las sesiones extras, la plenaria de la Cámara estuvo discutiendo el proyecto durante 12 horas en las que los congresistas presentaron sus centenares de comentarios sobre el texto y en la jornada convocada para este miércoles podrían llegar decenas más.

Incluso, en medio del debate se hundió una que buscaba crear una subcomisión para estudiar todas las propuestas presentadas para ese texto porque son tantos los reparos que genera que analizarlos en detalle necesita de jornadas maratónicas.

Las asociaciones médicas y científicas presentaron un derecho de petición pidiendo que el proyecto sea discutido artículo por artículo para evitar que este sea pupitreado por la plenaria, pero el presidente de la Cámara se niega a aceptar esa solicitud. “No pupitreado, ni artículo por artículo. Así de simple”, escribió Salamanca.

Quienes se oponen al proyecto sostuvieron que el proceso ya tendría vicios de trámite porque en la jornada del martes el presidente de la Cámara comenzó la votación de la ponencia positiva del texto una vez la ponente, la representante María Eugenia Lopera, leyó le ponencia, sin dar espacio a la deliberación sobre esta.

Salamanca se defiende y sostiene que “no podemos normalizar que dos mujeres interrumpan la ponencia de otra mujer para no debatir, ni vapear en medio de una sesión cuando está prohibido, ni gritar y manotearle a una mujer representante. Insto a mis colegas a dar un debate tranquilo y argumentado. No todo vale”.

Ministros Juan Fernando Cristo y Guillermo Alfonso Jaramillo. | Foto: Tomada de X @MinInterior

Ha sido tal la polémica despertada por el debate de la reforma a la salud en la plenaria de la Cámara, que los representantes Katherine Miranda, Carolina Arbeláez, Marelen Castillo y Juan Espinal, entre otros, alertaron que la ministra de Transporte, María Constanza García, habría estado buscando votos a las afueras de la plenaria.

Con todo un panorama de controversias en el que el propio Salamanca vaticina que la reforma a la salud quedará para 2025, la plenaria de la Cámara se vuelve a reunir este miércoles para retomar el estudio en segundo debate del proyecto de ley.