Las palabras de León Fredy Muñoz, embajador de Colombia en Nicaragua, en apoyo a la dictadura de Daniel Ortega, siguen generando polémica. Óscar Villamizar, representante del Centro Democrático, citará al canciller Álvaro Leyva a un debate de control político para que le explique al Congreso de la República la participación del diplomático en una caminata de aniversario de la revolución sandinista.
En concreto, la proposición que se radicará ante la mesa directiva de la Cámara de Representantes pide que el canciller explique las posiciones diplomáticas ante regímenes autoritarios.
“Por medio de la presente proposición nos permitimos citar al señor canciller de la República, doctor Alvaro Leyva Durán, para que explique ante la Cámara de Representantes las posiciones diplomáticas que han asumido la misma Cancillería y algunos embajadores frente regímenes autocráticos que, incluso, han llegado a participar activamente en actividades políticas internas de los países donde se ejerce la representación diplomática o guardar silencio frente a acciones claramente violatorias de los derechos”, se lee en el documento.
También piden informar los cambios a las políticas diplomáticas: “Como democracia, ha sido tradición del país promover y consolidar la democracia dentro de la región como perpetúa la Carta Democrática Interamericana fundacional de la Organización de los Estados Americanos (OEA), de la que Colombia es suscriptora”.
El representante cita el segundo artículo de la convención, en el que se resalta que la democracia representativa es la base del Estado de Derecho y los regímenes constitucionales de los estados miembro de la OEA.
“Por lo anterior, resulta por lo menos incoherente y contrario a la convención las posiciones que ha tomado el Gobierno nacional en cabeza del canciller al tomar posición frente a los gobiernos de Nicaragua y Venezuela, al no solo abstenerse de votar sanciones internacionales por las flagrantes transgresiones a la democracia, sino abiertamente apoyar los regímenes dictatoriales de la región”, agregó el documento.
El representante añadió: “La democracia y el respeto de los derechos humanos no son negociables. Apoyar dictadores es una traición a los principios constitucionales de la patria”.
Atención: Cancillería citó con urgencia en Bogotá a embajador de Nicaragua, León Fredy Muñoz, por participación en marcha sandinista
SEMANA conoció por fuentes de la Cancillería que la participación del embajador de Colombia en Nicaragua, León Fredy Muñoz, en la marcha sandinista no cayó bien en el Palacio San Carlos. Incluso, el mismo canciller Álvaro Leyva se habría molestado fuertemente con la actitud de Muñoz hacia el régimen de Daniel Ortega.
El tema no quedó en un simple llamado de atención que se le hizo a Muñoz desde el ministerio, sino que, además, esta revista conoció que se adelanta una investigación desde la oficina de control interno por sus actuaciones. Asimismo, Muñoz fue llamado a consultas por Leyva a Bogotá para hablar directamente con el canciller sobre el tema en las próximas horas.
Y es que el video que se conoció de Muñoz en la celebración de la revolución sandinista en ese país despertó una profunda polémica no solo en Colombia, sino en el panorama internacional. Algunos reclaman que, según tratados internacionales, una figura diplomática no puede inmiscuirse en temas políticos del país en el que se encuentra.
“Ojo. El embajador de Colombia en Nicaragua estaba celebrando los crímenes de Daniel Ortega en la Caminata 44/19. El Artículo 41 de la Convención de Viena señala que los diplomáticos no deben ‘inmiscuirse en los asuntos internos de un Estado’ y mucho menos en temas políticos”, alertó el exembajador de Nicaragua ante la OEA, Arturo McFields Yescas.
Incluso, desde Estados Unidos criticaron la posición del embajador colombiano. “Es inconcebible que el embajador del Gobierno Petro aplauda una revolución marxista y sangrienta. Es un grave insulto a todos los nicaragüenses y exiliados que aún sufren las repercusiones de los sandinistas”, aseguró el senador de ese país, Marco Rubio.
Tras el escándalo y el llamado de atención de la Cancillería, Muñoz tuvo que salir a dar explicaciones. Sin embargo, se mantuvo en su posición que como embajador de ese país debe “participar en reuniones o actividades importantes para el Gobierno”.
Además, dijo que esa relación debe ser “estratégica” para llevar a cabo la mejor representación del país y que deje de ser visto simplemente como “una figura decorativa”. “Como lo ha dicho nuestro presidente Gustavo Petro, la diplomacia del Gobierno del cambio debe ser una diplomacia franca, mirando directamente al otro, simpatizando con el otro para lograr los objetivos que como embajador es mi obligación cumplir”, afirmó el embajador en Nicaragua.