El canciller Luis Gilberto Murillo confirmó que el gobierno de Gustavo Petro está implementando ajustes a las políticas migratorias del país en medio de una nueva tesis que sostiene el oficialismo de que Colombia, más que país de destino de migrantes, se está consolidando como una geografía de tránsito.
El funcionario detalló que las políticas del país sobre la movilidad humana se están adaptando a lo que el Gobierno considera es la “nueva realidad” de la migración con Colombia como territorio de tránsito y no necesariamente de acogida.
“Nosotros estamos adaptando al país a la condición, de no ser simplemente un país de acogida porque nos hemos convertido en un país de tránsito y eso tiene desafíos distintos”, aseveró el ministro de relaciones exteriores.
“Vamos a modificar el marco de gobernanza de los temas migratorios en Colombia. Vamos a modificar la Comisión Intersectorial de Migraciones y movilidad humana. El Ministerio de Relaciones Exteriores es rector de estos temas, pero tenemos una responsabilidad entre distintos Ministerios”, acotó el canciller Murillo durante una rueda de prensa que tuvo lugar en la mañana de este miércoles (19 de junio).
Precisamente, dentro del Ministerio de la Igualdad (cartera cuya creación ya fue tumbada por la Corte Constitucional) hay una dirección encargada de este asunto, un nuevo despacho dentro de la arquitectura institucional colombiana en la que se bajó el rango desde el que se tratan esos asuntos.
Y es que hasta antes del Gobierno de Gustavo Petro esta cuestión estaba en el despacho del jefe de Estado a cargo de un rol de asesor presidencial que trabajaba directamente en la Casa de Nariño; ahora, está adscrito a una dirección que debe reportar a un Viceministerio, que a su vez reporta al Ministerio y luego a la Presidencia.
Sobre el fenómeno de movilidad humana en el país, el funcionario detalló que se ha detectado un incremento de los flujos migratorios marítimos por San Andrés durante cada periodo en el que se incrementan las restricciones en el Tapón del Darién, la frontera terrestre entre Colombia y Panamá.
“El presidente Petro ha sido muy claro en que nosotros como región debemos movernos hacia la ciudadanía latinoamericana y caribeña (...) Por eso les damos la acogida a cerca de 600 mil migrantes de los países de América Latina y el Caribe, la gran mayoría son venezolanas y venezolanas, y lo que ese decreto plantea es crear un permiso especial de permanencia para que los que sean custodios de niños, niñas y adolescentes puedan reagruparse”, enfatizó el ministro de relaciones exteriores, haciendo referencia al documento que se conoció en la tarde del martes (18 de junio).
No obstante, las organizaciones de Derechos Humanos que defienden a los migrantes han apuntado que ese decreto no garantiza la protección efectiva de la población venezolana.
En palabras de Ana Karina García, de la Fundación Juntos se puede, es necesario abrir el estatuto para acceder al PPT porque “volver al PEP es un retroceso a la política migratoria”. El borrador de decreto sobre ese asunto ya fue publicado para comentarios de los expertos.
Cambios en planta de la Cancillería
En relación con el tema de Venezuela, el Gobierno Petro se alista para abrir seis nuevos consultados en ese país para completar una decena de oficinas de atención a la población colombiana que allí reside en el marco del restablecimiento de las relaciones bilaterales que emprendió el Ejecutivo hace casi dos años.
Finalmente, el canciller Murillo detalló que tendrá “embajadores itinerantes” en asuntos de política global de drogas (con Laura Gil) y sobre género (a cargo de Arlene Tickner).
“Hay una serie de ajustes que estamos haciendo que son importantes, pero les daremos a conocer esos ajustes más adelante. Por ahora estamos muy expectantes de que el embajador Jorge Rojas va a asumir el Viceministerio de Relaciones Exteriores”, indicó Luis Gilberto Murillo en referencia a los cambios en la planta de la Cancillería.