El canciller Luis Gilberto Murillo fue posesionado oficialmente en ese cargo luego de que el excanciller Álvaro Leyva fuera suspendido por varios meses por la Procuraduría y Murillo lo tuviera que reemplazar en encargo. Murillo venía de ser el embajador de Colombia en Estados Unidos y en como diplomático quedó Daniel García-Peña.
Tras haber sido ratificado en el cargo, Murillo entregó declaraciones a los medios de comunicación en las que dio luces de lo que le pidió Petro para el cargo y en lo que trabajará en materia de relaciones diplomáticas representando a Colombia.
Uno de los temas fundamentales fue las relaciones con Venezuela, ya que Petro decidió dar un viraje y ser cercano a Nicolás Maduro. Incluso, el mismo Murillo ha dicho que Colombia está dispuesto a verificar las elecciones que se desarrollarán en ese país, a pesar de las críticas en materia internacional en las que se han denunciado faltas de garantías.
“El Gobierno venezolano me ha tratado bien. Yo tengo muy buena relación con el canciller Yvan Gil, estamos en comunicación permanente, estamos mirando los asuntos respetando obviamente la soberanía de Venezuela y como Venezuela respeta la soberanía colombiana y estamos trabajando para fortalecer los mecanismos de vecindad e integración”, afirmó el canciller Murillo.
Otro de los temas fundamentales que trató Murillo en esas declaraciones fue respaldar el llamado que hizo la Corte Penal Internacional (CPI) a través del fiscal Karim Khan en el que dictó órdenes de detención en contra del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu y varios líderes del grupo terrorista Hamás.
Murillo confirmó que Colombia seguirá teniendo la misma posición que han tenido hasta ahora cuestionando fuertemente a Israel pero sin cuestionar a Hamás. “Nosotros hemos expedido unos comunicados que obviamente respaldan la decisión de la fiscal Karim Khan en donde ha manifestado que existen todos los indicios que demuestran que se ha cometido un genocidio en Gaza, lo que ha venido planteando el presidente Petro desde hace mucho tiempo, desde que inició este conflicto tan lamentable para la humanidad”, aseguró Murillo.
Murillo pidió que la Sala Plena de la CPI acoja la petición del fiscal Khan. “Estamos muy expectantes porque también hemos adelantando unas acciones y contactos con otros países en América Latina para que se sumen precisamente a esta petición porque aquí lo que se está definiendo es la vigencia del Derecho Internacional público y eso implica también el papel que juegan sus cortes”, afirmó el canciller.
En medio de la posesión, el presidente Gustavo Petro le pidió a Murillo no concertar una nueva agenda con EE. UU. que tenga otro enfoque distinto hasta el que ahora ha impartido por la lucha contra las drogas.
“La propuesta de construir una red intercomunicada de energía eléctrica americana, que solo lleve energías limpias, que aproveche el gran potencial de Suramérica y que pueda ayudar a descarbonizar la economía de los Estados Unidos, creo que es central. Ese debe ser un tema de la Cancillería”, aseguró el mandatario en ese acto.
Petro reconoció que no ha sido “fácil” trabajar conjuntamente con Estados Unidos alrededor de la transformación energética, sin embargo, le dio lineamientos a Murillo para siga siendo necesario que la humanidad gire a un enfoque de descarbonización. “Es decir, dejar de usar petróleo y carbón, sabedores de que los grandes capitales del petróleo y del carbón tienen su asiento precisamente en los Estados Unidos”, cuestionó Petro.
“No es nada fácil encontrar las fuerzas dentro de los Estados Unidos que, aliadas de la humanidad, puedan llevar a esa ingente tarea de hacer que Estados Unidos sea cero emisiones, que tenga una economía descarbonizada. Esto implica un cambio en las relaciones de poder interno y externo en el mundo”, le insistió el mandatario a Murillo.