En los últimos días, el Ministerio de Relaciones Exteriores ha estado en el ojo del huracán por cuenta de las críticas de la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática (Unidiplo), organización que señala que la Cancillería estaría recortando los cupos para nuevos ingresos a la carrera diplomática.
En concreto, Unidiplo hace referencia a la Resolución 1041 de 2023 de la Cancillería, en la que se abre la convocatoria anual para quienes estén interesados en ingresar a la carrera diplomática. Sin embargo, contrario a lo que ocurrió en años anteriores, cuando se abrían entre 30 y 40 cupos, en esta oportunidad solo hay espacio para 15 profesionales.
“Este es un número históricamente bajo que no se veía desde hace por lo menos dos gobiernos y que nos preocupa. Significa que se va a ralentizar el crecimiento de la carrera diplomática, que es la que permite que haya personal capacitado en la planta de la Cancillería. En los últimos diez años, habíamos visto números consistentes de entre 20 y 40 funcionarios que se integraban a la carrera”, le dijo a SEMANA Miguel Ruiz, vocero de la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática (Unidiplo).
En respuesta a estos señalamientos, la Cancillería le indicó a esta revista que “no es cierto que se trate de un recorte de cupos, sino que, debido a que durante la convocatoria a los cursos de ingreso a la Carrera Diplomática y Consular correspondientes a los años 2020, 2021 y 2022, se habilitaron 118 cupos de los 125 cargos existentes, la Cancillería cuenta únicamente con 7 cupos disponibles para el curso correspondiente al año 2023; razón por la cual, no es posible afirmar, que se trate de un recorte, sino de una imposibilidad de ofrecer más cupos, por no contar con disponibilidad de cargos en la mencionada planta del Ministerio”.
A pesar de la limitación de espacios para nuevos ingresos a la carrera diplomática, la Cancillería indicó que realizará “las gestiones correspondientes para habilitar 8 cupos adicionales”, con lo que se sumaría el total de 15 espacios que se anunció en la resolución.
La entidad aclaró, además, la ley colombiana “no establece un número mínimo de cupos que deban ofrecerse a los aspirantes que pretendan ingresar a la Carrera Diplomática y Consular.”
En cambio, Unidiplo afirma que hay 615 cargos del escalafón de la carrera diplomática y consular, y solo 481 funcionarios de carrera para ocuparlos. Este año se incorporarán 39 nuevos funcionarios que completaron el curso de formación. Es decir, en 2023, la carrera estará integrada por 520 funcionarios, lo que indica que hay un déficit de más de 90 profesionales que tienen que ser suplidos, la mayoría de las veces, con nombramientos políticos.
María Angélica García, presidenta de Unidiplo, advierte: “Hoy tenemos 53 vacantes en el escalafón y se van a abrir más, pues solo este año 19 terceros secretarios ascienden a segundos secretarios, y en febrero de 2025 otros 23 terceros secretarios ascenderán”.
Más embajadores de carrera
El Ministerio de Relaciones Exteriores también señaló que en los últimos meses se han adelantando acciones con miras a fortalecer la carrera diplomática y consular:
“Es importante destacar que, por primera vez en la historia, el 40 % de las embajadas están en manos de diplomáticos de carrera. El Ministerio de Relaciones Exteriores con el fin de fortalecer la Carrera Diplomática y Consular, desde el año 2016 al 2023, ha ofrecido 215 cupos en cargos de Tercer Secretario de Relaciones Exteriores, a través de convocatoria abierta por meritocracia”, indicó la entidad.
En todo caso, algunos sectores han señalado que la Casa de Nariño se ha caracterizado por elegir aliados políticos, amigos y hasta personas cercanas a la primera dama, Verónica Alcocer, en puestos diplomáticos de suma importancia para Colombia en otros países. Ese es el caso del exrepresentante León Fredy Muñoz en Nicaragua, Camilo Romero en Argentina, y Lina Quessep en Italia. Ella es oriunda de Sincelejo y es amiga de infancia de la primera dama.
A su vez, Elizabeth Carrillo, activista arhuaca cercana a la vicepresidenta Francia Márquez, fue nombrada embajadora en Bolivia. También está el caso de Juan Manuel Corzo, exsenador conservador, en Paraguay.