El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia se pronunció oficialmente después de que el presidente Gustavo Petro anunciara, en medio de las marchas del primero de mayo, que rompería relaciones con Israel a partir de este jueves.
“Esta decisión se dirige exclusivamente a la ruptura de relaciones diplomáticas y nunca contra el pueblo israelí ni contra las comunidades judías, ya que nos unen lazos históricos y de amistad que persistirán”, dijo la Cancillería.
Desde el Gobierno colombiano aseguraron que están comprometidos con “el respeto a la vida y la promoción de la paz” y que esperan que Israel y Palestina lleguen a una solución dialogada. Hasta ahora, Colombia sigue sin cuestionar el actuar de Hamás en contra de ese país.
Por otro lado, desde la Cancillería anunciaron lo que pasará con los diplomáticos en ese país. “El Ministerio de Relaciones Exteriores informará a la Embajada de Israel en Colombia el alcance de la medida anunciada por el presidente. Los funcionarios diplomáticos colombianos regresarán a nuestro país. Nuestros connacionales en Israel y en Palestina seguirán recibiendo la asistencia y servicios necesarios por parte de la sección consular de la embajada en Tel Aviv”, dijeron.
Desde la diplomacia colombiana insistieron en su posición frente al conflicto entre Israel y Palestina y la guerra que se vive en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre de 2023. “Colombia no ha dejado de insistir, una y otra vez, en la necesidad de lograr un alto al fuego, la liberación inmediata de los rehenes, así como el ingreso regular y en las cantidades necesarias de ayuda humanitaria para la población de Gaza. El país ha respaldado firmemente todas las acciones y esfuerzos para aliviar la crisis humanitaria”, aseguraron desde el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Además, mencionaron que desde Colombia han exigido, junto a otros Estados, que Israel se ajuste al derecho internacional humanitario y actúe según los lineamientos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) emitidos por su Consejo de Seguridad, en los que el país ha participado.
En cambio, afirman que se siguen presentando distintos hechos que han cuestionado. Por ejemplo, hablan de una “represalia” desde Israel en los que, según la Cancillería, no se habrían respetado los acuerdos del derecho internacional humanitario.
“Colombia ha abogado por la necesidad de realizar una conferencia de paz, no solo para resolver la guerra en Gaza, sino para retomar el camino de negociaciones que conduzcan a una solución permanente”, señalaron desde la Cancillería.
Además, consideran que se puede llegar a una solución del conflicto en la que vivan ambos países. “Palestinos e Israelíes merecen vivir en paz bajo fronteras seguras y reconocidas”, afirmaron.
Y que Colombia es un “país comprometido con la paz” y rechaza cualquier acto de violencia. “Es un país que trabaja día a día para conseguir la paz dentro y fuera de su territorio. En consecuencia, recientemente, el país se unió a otros 17 Estados para exigir la liberación inmediata y sin condiciones de los rehenes secuestrados por Hamás”, aseguraron desde la Cancillería.
Asimismo, afirmaron que la negociación y el diálogo son las vías por medio de las cuales se pueden resolver los conflictos y apoyar el multilateralismo. “Igualmente, el país se ha pronunciado en los foros internacionales y ha intervenido ante la Corte Internacional de Justicia, tanto en el caso de Sudáfrica contra Israel por violación de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948, como en el trámite de la opinión consultiva sobre los efectos jurídicos de la ocupación israelí y los asentamientos”, señalaron por parte del Gobierno Petro.
En cambio, dijeron que supuestamente, ante esos llamados de Colombia, lo que se ha producido son insultos en contra del mandatario por esa posición, llamándolo “antisemita”.
“Colombia no puede ser cómplice ni guardar silencio manteniendo relaciones diplomáticas con un gobierno que se comporta de esa manera y enfrenta tan graves acusaciones de la comisión de un genocidio, crímenes de guerra y violaciones al derecho internacional humanitario”, aseguraron.