La controvertida reforma a la salud que archivó la Comisión Séptima del Senado parece que sí es el proyecto personal de la exministra Carolina Corcho, como se lo contó a SEMANA la exministra de Agricultura, Cecilia López.
Al menos, así lo evidencian las más recientes posturas de la médico psiquiatra, quien está convencida de que la apelación del archivo en la plenaria del Senado podría, eventualmente, revivir la iniciativa y someterla a estudio en otra comisión.
“El presidente del Senado, Iván Name ha conformado una comisión accidental en donde están los presidentes de las comisiones del Senado para presentar un informe a la plenaria que defina si acepta el archivo o no la reforma a la salud por parte de nueve senadores de la Comisión Séptima”, informó.
Dijo que es el momento “en que vamos a observar la estatura política de la plenaria del Senado, que debe superar las obstinaciones irracionales y obstruccionistas, frente a la necesidad urgente de parar la crisis financiera y humanitaria de la salud e iniciar un tránsito hacia un nuevo sistema de salud”.
Reiteró que las mayorías de la Comisión Séptima no estuvieron a la altura del momento histórico. “Ya veremos si lo logra la plenaria del Senado que, suponemos, se debe a su pueblo, al interés público y general y no a los negocios de unas minorías que han expropiado hasta la vida, sobre todo de los más vulnerables”.
Y siguió: “Veremos la catadura de una de las instituciones democráticas más representativas e importantes del Estado”.
Aunque Corcho es optimista, el escenario de la apelación del archivo de la reforma a la salud no es nada sencillo. Por un lado, las relaciones entre el grueso del Senado y la Casa de Nariño están rotas. Así se evidenció este miércoles 10 de abril cuando el presidente, Iván Name, decidió levantar la plenaria cuando se intentaba avanzar en la reforma pensional.
Aunque la pensional lucha contra la falta de tiempo, el senador de la Alianza Verde, visiblemente molesto por los maltratos que el Legislativo ha recibido por parte de Petro, tomó la radical decisión.
Además, si se aprueba la apelación de la reforma a la salud, no solo cambiaría de comisión sino que empezaría su estudio desde cero. Incluso, se perdería el avance que el proyecto obtuvo en la Cámara de Representantes. Y esa iniciativa también agoniza por el tiempo en el Senado porque debe estar aprobada el 20 de junio.
Mes y medio o dos, si el ministro del Interior Luis Fernando Velasco decide convocar a sesiones ordinarias, no es suficiente para aprobar esta iniciativa que le ha generado el mayor desgaste al gobierno Petro y, además, tumbó a cuatro ministros, entre ellos, Carolina Corcho, Alejandro Gaviria, José Antonio Ocampo y Cecilia López.
Petro, quien conoce como pocos el Congreso, tiene claro que lo mejor es radicar un nuevo texto de reforma a la salud. Incluso, no se descarta que sea antes del 20 de julio porque se presentaría por vía ordinaria.
Quiere que sea un proyecto corto que contenga máximo 10 artículos porque la reforma a la salud que archivó la Comisión Séptima era un documento extenso de 170 artículos que terminó convertido en un tratado o una especie de Frankenstein donde le metieron mano desde la exministra Carolina Corcho hasta La U, el Partido Liberal, el Conservador, entre otros. El propio Petro llamaba jocosamente su proyecto como “el código de Hammurabi”.
Actualmente, los nueve senadores que archivaron la reforma a la salud en la Comisión Séptima empezaron con la construcción de un nuevo proyecto: hay comentarios de 300 actores y ya invitaron al Gobierno al diálogo.