La exministra de Agricultura, Cecilia López, decidió hablar por primera vez de las graves amenazas que recibió tan pronto salió del gobierno del presidente Gustavo Petro.
En diálogo con SEMANA, la reconocida dirigente política confesó los momentos de tensión que vivió durante esos días y contó detalles de las conversaciones que sostuvo con el primer mandatario donde le informó lo que estaba pasando. Él –según la exministra– no les dio ninguna importancia.
Esta historia se la contó a esta revista porque considera que tras el nombramiento de Juan Fernando Cristo como ministro del Interior, lo más probable es que el presidente deje de estigmatizar al centro político. Y de paso, se reduzcan las amenazas en su contra en redes sociales.
“Lo positivo de que Petro nombre a Cristo, además de sus virtudes, es ver si deja de estigmatizarnos. Porque lo repito y lo diré, aunque he estado callada: cada vez que el señor presidente Petro nos estigmatiza, aumentan las amenazas no solamente por Twitter, sino por otros medios, como WhatsApp o gente en la calle. Él no se da cuenta de que al estigmatizarnos y al decir que nosotros le destruimos su proyecto nos está generando amenazas de todo tipo, que yo, personalmente, he sentido y que ha llevado a que me refuercen la seguridad. Entonces, lo positivo de esto es que el presidente no podrá hacer una distinción entre el centro de Cristo y nosotros. Si algo no es Cristo es de izquierda, hasta donde lo conozco”, dijo.
Según la exministra, algunas personas radicales cercanas al Pacto Histórico estuvieron detrás de sus amenazas.
“Decían que destruí el proyecto, lo que dice el presidente. Esas amenazas me las hicieron cuando fui ministra y el presidente supo. Gente que Petro tiene en su Gobierno dijo en unos grupos de WhatsApp, que SEMANA reveló: “Cecilia está traicionando el proyecto del presidente, hay que bajarse a Cecilia”. Yo le mostré a Petro los chats. O sea, ya las amenazas venían de la gente que lo sigue a él y que nunca creyeron que nosotros estábamos comprometidos con el proyecto. El presidente lo supo y no les dio ninguna importancia. Lo único que me preguntó fue: “¿Este quién es?”. Ahí lo tengo en el correo que intercambié con él”, manifestó.
Por las amenazas en su contra ha tenido que cambiar un poco su rutina de vida: “Muchas cosas cambiaron, entre ellas, tener mucha seguridad. Tan pronto salí, ahí en su oficina se sentó una persona del Pacto Histórico y me dijo: “Por el bien tuyo, vete de Colombia”. Yo le dije que no me iba a ir porque aquí tengo mi centro de pensamiento”. Y señaló a SEMANA el lugar de su oficina donde la persona, cercana al petrismo, se ubicó y le hizo la recomendación.
Ella –reconoce– fue prudente “hasta el día que supe que el presidente dijo en un consejo de ministros que la culpa de que el proyecto no hubiera tenido éxito era porque nosotros habíamos desbaratado su propuesta. Ese día me enfurecí. Él lo ha venido repitiendo y es hora de contar la verdad”.