El Centro Democrático, partido de oposición, asegura que el presidente Gustavo Petro estigmatiza permanentemente a miembros de su partido. La colectividad se refiere al discurso del mandatario colombiano en Pereira, donde asegura que un empresario cercano a ellos ordenó matarlo en campaña.
“Cuando fui a hacer mi última manifestación en Pereira, de campaña presidencial, me tocó frenarla y no vine porque el anuncio que llegó era que un señor que llaman alias Calzones, él muy uribista, él muy del gota a gota, él muy del traqueteo y de La Cordillera, le había dicho a La Cordillera que me asesinaran. Eso no puede ser así, eso no puede ser en una sociedad que tenemos que hacer transitar hacia la paz”, dijo Petro.
El mandatario se refirió a César Augusto Giraldo Montoya, un empresario de la región que en varias ocasiones ha sido señalado por el presidente por supuestas actividades ilegales que hasta el momento no han sido probadas.
Por esta razón, el Centro Democrático se pronunció, rechazando las acusaciones del presidente.
“El Centro Democrático rechaza la permanente estigmatización que el Presidente de la República hace a miembros de nuestro partido. Ayer desde Pereira, cobardemente y sin prueba alguna, acusa a un empresario cercano al Centro Democrático, de ser agiotista, narcotraficante y perteneciente a una banda criminal, cuando a la fecha de hoy las autoridades judiciales y de policía no han encontrado motivos para abrirle investigación o proceso alguno”, manifestó el partido en su cuenta de X.
De acuerdo con el partido, “esta acusación infame, ilegal y delictiva por parte del presidente Petro, solo pretende desviar la atención de la opinión pública nacional, ante los graves problemas económicos, sociales y de seguridad que enfrenta el país por la ineptitud e incapacidad del Gobierno”.
El Centro Democrático también dice que el Gobierno nacional, en vez de “perseguir políticamente a sus opositores”, debería “explicarle al país cómo sus funcionarios y cómplices políticos se vienen robando sistemáticamente los recursos de los colombianos sin asomo de vergüenza alguna”.
Sobre el tema también se pronunció el expresidente Álvaro Uribe, quien dio a conocer su indignación por las palabras del presidente.
“En Pereira, el presidente de la República volvió a referirse a un empresario, que le ha ayudado al partido, lo señaló de narcotraficante y agiotista, de nuevo lo acusa de querer hacerlo matar a través de la banda La Cordillera”, dijo.
Y aseguró que desde hace más de dos años las autoridades han investigado la denuncia del discurso presidencial “sin encontrar mérito”. Uribe agregó que “en una ocasión” le explicó al mandatario.
“La persona mencionada le ha ayudado a muchos candidatos y partidos y solamente les fastidia cuando ayuda al Centro Democrático. Está el récord de la financiación transparente de nuestras campañas. También la lucha efectiva de nuestros gobiernos contra el narcotráfico y la extradición de cerca de 1.200 personas acusadas de este delito”, agregó el expresidente.
Uribe concluyó que viven la “amenaza diaria” y que la “calumnia no cesa”. Sin embargo, expresó que “ninguna injusticia nos va a silenciar en la exposición argumental de nuestras preocupaciones por Colombia, en este momento de mayores dificultades colectivas”.