Pasaron ocho meses en los que la reforma pensional estuvo totalmente estancada, sin debate, pero sí muchas polémicas en torno a lo que propone el proyecto del gobierno del presidente Gustavo Petro. Este año tampoco arrancó con pie derecho su discusión en el Senado, donde van cero y dos veces que no se logra el cuórum necesario ni avances en su discusión.
El Congreso de la República volvía a discutir la reforma pensional presentada por el Gobierno, que va para su segundo debate en la plenaria del Senado.
El articulado quedó en la agenda del Legislativo, después de que pasaran ocho meses sin que ese texto, que cambia el sistema de pensiones vigente en Colombia, fuera tenido en cuenta en las prioridades del recinto, a pesar de que, junto con la reforma a la salud y la laboral, es uno de los proyectos bandera de Petro.
Desde antes de que iniciara esta legislatura, ya se conocían algunas posiciones de los partidos respecto de esta y otras reformas. La bancada del Centro Democrático había definido su papel de oposición y negativa a la pensional, como también a las restantes, que, según algunos congresistas, no solo va a afectar a los colombianos, sino que generará una crisis de grandes proporciones en el sistema de pensiones y de salud.
¿En punto muerto?
Son varias las demoras que ha tenido la discusión de esta reforma, tan es así, que desde la bancada del Pacto Histórico ya le estaban pidiendo al presidente del Senado, Iván Name, que tuviera en cuenta ese proyecto de ley dentro de la agenda, por lo que se programó una primera discusión para este martes 27 de febrero, la cual no prosperó por falta de cuórum.
La nueva citación a los congresistas fue para este miércoles 28 de febrero, con el fin de avanzar en el segundo debate, de los cuatro que se deben realizar en el Senado, pero, de nuevo, este no se dio por falta de presencia de congresistas en el recinto.
La presidenta de la corporación, la senadora María José Pizarro, mientras se votaban los impedimentos, levantó la sesión y anunció que la fecha para continuar con la discusión sería notificada por la secretaría del Senado en los próximos días.
Esa reforma fue aprobada en su primer debate en la Comisión Séptima del Senado desde el 14 de junio de 2023 y, solo hasta ahora, después de ocho meses sin discusión, regresa al análisis del recinto. Su trámite inicia contra tiempo porque tiene hasta el fin de la legislatura 2023-2024 para ser aprobada. Si el Gobierno no consigue acelerar ese trámite, el articulado se va a hundir.
Los puntos que preocupan de la pensional
Tras la suspensión del debate, la senadora Paloma Valencia aseguró en su cuenta de X que detendrá este proyecto con su partido por considerarlo inconveniente para los colombianos y por estar, según ella, lleno de ‘micos’.
“La reforma pensional le libera al Gobierno caja en el presupuesto general. El Gobierno tendría entonces nuevos recursos para gastar ahora. En 2025, Petro recibiría 4,2 billones de pesos. En 2026, recibiría 5,2 billones de pesos. ¡Esta plata debe ahorrarse! (art. 24). No hacerlo es obligar a los jóvenes colombianos en el futuro a pagar esta deuda”, explicó Valencia en un hilo en su perfil de X.
Según Valencia, lo más delicado de esta reforma es que “el Gobierno pretende decidir dónde y cómo invertir los ahorros y rendimientos de los colombianos, mediante facultades extraordinarias”.
Esa es precisamente una de las polémicas y de las preocupaciones que alerta no solo a quienes se oponen, sino también a los representantes de las administradoras de fondos privados de pensión (AFP), la Bolsa de Valores de Colombia (BVC) del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF), y el Gobierno, representado por la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez y el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, además de parlamentarios de distintas bancadas, quienes intervinieron el pasado 20 de febrero en la comisión tercera del Senado sobre este proyecto.
La senadora Lorena Ríos Cuéllar advirtió: “La reforma pensional del Gobierno no es viable. Sus pilares no tienen sostenibilidad ni responsabilidad fiscal, además de ser un paso atrás para los derechos pensionales”. La congresista del Partido Colombia Justa Libres apuesta por una ponencia de archivo a la reforma.
Mientras que la senadora del Pacto Histórico Clara López Obregón defiende que “para ser consecuentes con el envejecimiento general de la población, es necesario aprobar la reforma pensional con celeridad. Es falso que con la garantía de una pensión para todas y todos el sistema quebraría, otra muestra de catastrofismo”.
Mientras las opiniones siguen dividas, el Pacto Histórico buscan consensos para avanzar en el debate.