La exvicepresidenta y excanciller Marta Lucía Ramírez le salió al paso a su responsabilidad en un supuesto negocio de equipos militares entre empresarios italianos y el gobierno anterior.

“Inaceptable que en el más grave escándalo político de Colombia por audios con graves confesiones de financiación de la última campaña presidencial, pongan cortinas de humo. Como vicepresidenta y canciller del anterior gobierno no tuve funciones de compra de equipo militar”, aseguró Ramírez.

Las denuncias fueron compartidas por el presidente Gustavo Petro, en medio de todo el escándalo que rodea a su gobierno. “80 millones de dólares en sobornos se iban a distribuir por compra de equipos militares navales entre una empresa italiana y altos funcionarios del anterior gobierno. La investigación italiana avanza, solicito a la Fiscalía iniciarla en Colombia”, aseguró Petro junto a un artículo de un medio de ese país.

Tras la respuesta de Ramírez, Petro volvió a emprenderla contra la exvicepresidenta. “¿Cortinas de humo? ¿Sobornos por 400.000 millones de pesos en el pasado alto gobierno? Esto es peor que Odebrecht”, aseguró el mandatario.

Marta Lucía Ramírez respondió que no tiene nada que ver con la compra de los aviones. | Foto: Publicaciones Semana Guillermo Torres Reina

Según el artículo del medio italiano Corriere della Sera, compartido por Petro, el empresario Alessandro Profumo y el expresidente del Consejo de Ministros de Italia Massimo D’Alema están siendo investigados por la fiscalía de Nápoles por la venta de barcos y aviones militares a Colombia. También mencionan a Giuseppe Giordo, exdirector general de Fincantieri.

“Los sospechosos actuaron en diversas capacidades como promotores de la iniciativa económica comercial de vender al Gobierno colombiano productos de empresas italianas con participación pública”, dice la acusación del ente acusador de esa ciudad, citada por el medio italiano.

Sobre el caso de Colombia, mencionan que están en la investigación “Edgardo Fierro Flores, jefe del grupo de trabajo para la presentación de oportunidades en Colombia; Marta Lucía Ramírez, canciller y vicepresidenta de Colombia, y Germán Monroy Ramírez y Francisco Joya Prieto, delegados de la comisión del Senado de Colombia”, señala el artículo.

Según las investigaciones que se adelantan, se trataría de 80 millones de euros que se dividirían entre el lado colombiano y el lado italiano mediante un bufete de abogados estadounidenses.

Gustavo Petro aprovechó la ocasión para dirigir la mirada fuera de su gobierno, en medio del escándalo que enfrenta. | Foto: Juan Carlos Sierra

De otro lado, Ramírez menciona que se trata de una cortina de humo por el escándalo que enfrenta actualmente el presidente Gustavo Petro tras la salida de dos de sus personas más cercanas desde la pasada campaña electoral: Armando Benedetti y Laura Sarabia.

En medio de toda la polémica que se ha generado, SEMANA reveló unos audios en los que escucha a Benedetti conversar con Sarabia. Mientras que ella le responde a través de chats. Benedetti estaba molesto porque sentía que le estaban dando un trato que no era cordial, a pesar de que fue el jefe de Sarabia y la llevó hasta donde Petro; y que le ayudó al mandatario a llegar al poder.

Con furia, Benedetti reconoce que hubo grandes sumas de dinero, que ayudó en varios momentos de la campaña y que estaba inconforme con su papel como embajador de Colombia en Venezuela.

Las peleas entre Armando Benedetti y Laura Sarabia generaron una fuerte crisis en el Gobierno. | Foto: Semana

Sarabia le ofreció algunos cargos, pero la relación se rompió al punto de que el escándalo se volvió de interés nacional y el presidente Petro no tuvo otro remedio que sacarlos a ambos de su gabinete.

Aunque ya se nombró al nuevo embajador de Colombia en Venezuela –que en el pasado se había mostrado en contra de Nicolás Maduro y le había pedido que dejara el poder– en el caso de Sarabia por ahora no se sabe quién sería su reemplazo. Se trata de una persona sobre la que el presidente debe tener su entera confianza, ya que será quien le maneja la agenda y está enterada de todos sus movimientos.