SEMANA: ¿Cuál es el propósito de este proyecto?
Andrés Barrios (A.B.): Este es un proyecto que trata de que en Bogotá tengamos espacios libres de droga para blindar a nuestros niños y que se prohíba el consumo en parques y en entornos escolares, porque estamos cansados, como ciudadanía, de ver que prácticamente tienen más derechos los bandidos que los jíbaros, que los niños y los padres de familia. Como tal el proyecto busca eso, regular los entornos seguros de droga.
SEMANA: ¿A través de qué figura se podría lograr?
A.B.: Es un proyecto de acuerdo que presentamos basados en nuestras competencias, con el objetivo de minimizar estas situaciones de riesgo en las cuales, sobre todo, están incurriendo hoy niños. Vemos el tema de consumo, pero también de porte, distribución de estupefacientes en el espacio público, es una cosa que ya se salió de control. En Bogotá con la derogación del Decreto 1844 los jíbaros prácticamente están haciendo de las suyas en los parques, entornos escolares y en las calles en general.
SEMANA: Este proyecto es una respuesta al decreto emitido por el gobierno del presidente Gustavo Petro?
A.B.: Es un proyecto que de alguna manera está buscando crear un puente, traer una respuesta. Lo que pasa es que la gente está cansada, fastidiada de los jíbaros, están ocupando estos entornos y lugares que le pertenecen a los niños y, sobre todo, la ausencia del decreto está haciendo mucho daño, entonces lo que estamos buscando es que como órgano normativo distrital es deber de nosotros velar por la protección de las nuevas generaciones. Ya vemos que ciudades intermedias como Bucaramanga, Barranquilla, Sincelejo, Santa Marta, Soacha, emitieron un decreto de prohibición y en Bogotá todavía seguimos a la espera.
SEMANA: Precisamente, estas ciudades han sentado un precedente. ¿Casos como el de Bucaramanga y Medellín son un referente para la capital?
A.B.: Yo creo que sí. Bogotá de alguna manera se está absteniendo de pronunciarse y esto no debería ser así. Esto son decisiones cruciales de ciudad que hay que tomar desde el comienzo y es cuestión de decisión. Entonces, pues yo veo que si ya se pudo allá, por qué acá no.
SEMANA: ¿Al alcalde Carlos Fernando Galán le ha faltado más contundencia en tomar esa decisión?
A.B.: Lo que yo veo con gran preocupación es que de alguna manera esto viene en Bogotá poniéndose un tema álgido desde la administración anterior de Claudia López, que teniendo todas las herramientas legales y constitucionales se abstuvo de pronunciarse en esta materia y de actuar. El alcalde Galán tiene 26 días de posesionado, está atendiendo el tema de los incendios en los cerros orientales, ya hizo también un pronunciamiento en este sentido y estoy a la espera desde el Concejo de Bogotá qué propone la administración.
SEMANA: ¿Cuál será el trámite que tendrá que surtir el proyecto para que esa idea se haga realidad?
A.B.: Ya cumplimos el primer paso que fue la radicación del proyecto en la secretaría general esta semana. Estoy esperando que se dé el sorteo de ponentes, en febrero va a ser muy importante dentro de las ordinarias y una vez se rinda ya ponencia, entonces el presidente de la comisión de gobierno, sobre todo, es el que nos tiene que agendar el debate.
Igualmente, creamos una comisión de los entornos libres de droga. Le quiero contar que este viernes acabamos de radicar una carta desde la comisión, poniéndonos al servicio de la Alcaldía, porque para nosotros es muy importante que este proyecto de reglamentación que ha anunciado el Distrito, que evaluemos la socialización de este instrumento, revisemos el elemento de participación ciudadana, cómo va a operar, que brindemos apoyo jurídico desde el Concejo. Entonces, junto con mis colegas de esta comisión, estamos con esta carta radicada frente al alcalde.