Bastante malestar ha generado en la militancia la decisión de la bancada del Partido Conservador de oficializar su declaratoria como partido de gobierno y entrar de esta manera a la coalición del presidente Gustavo Petro.

En un sector de la militancia ‘pura sangre’ de los conservadores aún no logran comprender este sorprendente, pero anunciado giro en la colectividad, que en la pasada campaña presidencial inició apoyando a David Barguil, cuando fue precandidato presidencial de Equipo por Colombia. Posteriormente, respaldó a Federico Gutiérrez y en la segunda vuelta, en una movida bastante particular, la mayoría de congresistas se fueron a las toldas de Gustavo Petro.

Uno de los más críticos con esta decisión ha sido el expresidente Andrés Pastrana, quien justamente estuvo en la Casa de Nariño a nombre del Partido Conservador y ha sido el último presidente que ha logrado poner esta colectividad a nombre propio.

Pastrana se mostró molesto con que los congresistas conservadores hayan llegado a apoyar un gobierno que, según él, tiene “manguala” con las organizaciones criminales.

“No hubo un voto conservador que avalara la manguala de Petro y su extrema izquierda con las organizaciones criminales del narcotráfico”, apuntó Pastrana.

El expresidente calificó, además, de “corrupta” la alianza de los parlamentarios con el presidente Petro.

“La corrupta alianza con Petro de los parlamentarios conservadores desprecia a la militancia del Partido e insulta sus principios”, indicó Pastrana.

Esa postura conservadora generó mucho malestar desde un principio en la colectividad y Omar Yepes, quien estaba en la dirección del partido hasta julio de este año, decidió dar un paso al costado. El directorio nacional tomó la decisión de reemplazarlo por el senador Carlos Andrés Trujillo, quien justamente fue uno de los impulsores de la campaña de Petro en el departamento de Antioquia.

Trujillo se encargó de ir llevando el conservatismo a la campaña de Gustavo Petro y en la dirección de la colectividad se encargó de convencer a sus compañeros de acompañar al mandatario en la coalición de gobierno.

Aunque en la política todo puede pasar, es la primera vez que un partido de derecha, que estuvo en la coalición del expresidente Iván Duque, acompaña en sus banderas a la izquierda del país, por lo que ese giro será un hito en la historia política de Colombia.

A pesar de las voces que pedían que la colectividad fuera independiente, los integrantes del directorio nacional tuvieron en cuenta las posturas que solicitaron que el partido fuera de gobierno.

No se puede negar que, desde un principio, el gobierno de Gustavo Petro trató de seducir a los conservadores y desde que llegó a la Casa de Nariño, el jefe de Estado los ha consentido bastante.

Esta colectividad, por ejemplo, tiene ministerio propio, en cabeza del ministro de Transporte, Guillermo Reyes. Y un viceministerio con Carlos Eduardo Enríquez Caicedo, hijo de la representante conservadora de Nariño Ruth Caicedo y del fallecido senador Eduardo Enríquez Maya.

Así las cosas, el conservatismo ya envió la comunicación al Consejo Nacional Electoral en la que oficialmente se declaran de gobierno. Los partidos políticos podrán cambiar su postura política frente al Ejecutivo por una sola vez durante sus cuatro años de mandato.

La decisión del conservatismo ha generado una serie de reacciones en el mundo político porque no creen que la colectividad haya pasado de respaldar los gobiernos de derecha en el país a apoyar a Gustavo Petro, quien ideológicamente está en una orilla distinta a los postulados de los denominados ‘godos’.