Ni siquiera a los animalistas les gustó el acto simbólico que se llevó a cabo en Duitama, en el que se tumbó a la fuerza una estatua del torero César Rincón. La senadora animalista Andrea Padilla, de la Alianza Verde, considera que fue erróneo y populista.
“Aquí les respondo a los periodistas que me han preguntado por el asunto de la estatua de César Rincón: que actos como el ocurrido en Duitama no desconfiguren la lucha por los derechos de los animales que, en esencia, es pacífica; ni nos desvíen de lo importante: la implementación de la ley que prohíbe las corridas de toros”, afirmó la senadora.
Además, dijo que se trata de “una acción que era innecesaria”. “Pudieron bajar la estatua tranquilamente, sin necesidad de ofender a un sector de colombianos o, mejor aún, dejarla para recordar el pasado y no repetirlo, anexando una placa en memoria de los toros asesinados. Creo que quienes hicieron esto se equivocan: siembran resentimiento y despilfarran recursos en actos populistas”, aseguró la congresista.
Igualmente, Padilla pidió que el plan de transformación que se anunció desde Prosperidad Social para las plazas de toros “no sea un derroche de recursos públicos”, los cuales la senadora considera que se necesitan para implementar otro tipo de leyes que realmente ayuden a los animales.
“La ley esterilizar salva para sustituir los vehículos de tracción animal, para construir centros de atención a animales silvestres y para un larguísimo etcétera de acciones que sí salvarán vidas de animales”, afirmó la senadora.
La decisión de tumbar la estatua generó una gran polémica. Hasta Duitama llegaron la senadora animalista Esmeralda Hernández, quien fue la autora del proyecto con el que se prohibieron las corridas de toros en el país. Estaba acompañada del director de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, y del alcalde de Duitama, José Luis Bohórquez.
La senadora destacó que estos espacios ahora serán para “mercados campesinos, para dinamizar las economías rurales, las economías populares, y permitirán, además, que puedan hacerse eventos culturales, artísticos”.
Aunque Gustavo Bolívar destacó un mensaje similar, SEMANA conoció que el director del DPS también estuvo en desacuerdo con ese acto. Según dijo el mismo funcionario, le señaló al alcalde del municipio “que tenía que hacerse con mucho respeto porque César Rincón es un colombiano respetable en el país, un ciudadano que, en su momento, había marcado un hito, una historia; esa fue una época donde no se tenía tanta conciencia sobre el maltrato y sufrimiento del animal. Entonces, el país no iba a entender que una persona que no le ha hecho mal a nadie y que es un buen ciudadano reciba ese trato”.
El mismo Rincón se pronunció en diálogo con esta revista y se mostró triste ante este hecho. “Nuestros valores éticos y morales están trastocados y no hay derecho a lo que pasa (...) Es que no hay más palabras, los calificativos se quedan cortos. Es lamentable”, afirmó. Y agregó: “Es una ideología que nos quieren imponer, es el gusto de ellos. Este es un golpe más. Estoy triste; como vamos, mañana van a censurar cualquier otra cosa, la libertad se nos está coartando”, añadió.