La ministra de Educación, Aurora Vergara-Figueroa, acusó a los operadores del sistema de salud de los maestros de estar negando la atención de los pacientes por “negociar” tarifas.
El señalamiento de la funcionaria del Gobierno de Gustavo Petro tiene lugar tras 10 días de la transición en el esquema del Fondo del Magisterio (Fomag), lapso durante el que los más de 800 mil usuarios de este se han estado quejando por la falta de atención.
Los pacientes entrevistados por SEMANA y quienes han compartido sus denuncias en redes sociales han asegurado que cuando intentan acceder a citas médicas, medicamentos, insumos médicos y otros servicios, los operadores les responden que no tienen contratos.
Sin embargo, la hipótesis que maneja el Gobierno de Gustavo Petro es que, a su juicio, estas instituciones no quieren prestar estos servicios para negociar los precios de los contratos.
“Frenar la atención para negociar tarifas, subir precios, ocultar y manipular información para generar pánico, es un delito”, acusó la ministra de Educación a la red de servidores que hasta hace unos días estuvieron facilitando ese derecho entre los afiliados al Fomag.
Vergara-Figueroa sostuvo que “hemos dispuesto todos los mecanismos necesarios y las autorizaciones para cuidar la vida de los docentes y sus familias. Poner el negocio por delante de la vida es inaceptable y vulnera el derecho fundamental a la salud”.
El Consejo Directivo del Fomag está compuesto por cinco asientos: tres del Gobierno representados por los ministerios de Educación, Hacienda y Trabajo y dos que son ocupados por representantes de los maestros a través de la Federación Colombiana de Educadores (Fecode). Desde esa instancia la ministra hizo un llamado para la prestación de los servicios.
“Desde el Consejo Directivo del Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio Fomag hacemos un llamado a las personas e instituciones que se han dedicado a negar servicios de salud a los maestros y maestras, y a sus beneficiarios”, escribió la ministra de Educación.
El cambio en el sistema de salud de los maestros comenzó el primero de mayo con una modificación en el esquema de contratación: antes la Fiduprevisora contrataba a 10 administradores regionales para que estos subcontrataran a todos los operadores, pero ahora esa tarea recae en la fiduciaria sin que haya espacio a la intermediación.
Esa sociedad económica mixta del Estado tiene una vicepresidencia del Fomag, que es la encargada de garantizar el funcionamiento del sistema del Fomag, pero lo que suceda con ese Fondo también es competencia del Ministerio de Salud, que fue el promotor del nuevo modelo.
De hecho, la vicepresidencia del Fomag aún no tiene a una vicepresidenta o vicepresidente en propiedad y el sistema ha estado operando con los lineamientos del gerente de salud del Fomag, José Milton Guzmán, quien apenas tomó posesión del cargo el sábado 4 de mayo, pese a que el sistema había comenzado el miércoles primero.
En las cuentas de redes sociales del Fondo de los educadores han estado compartiendo testimonios de pacientes que aseguran que sus casos ya fueron resueltos. Sin embargo, en redes también circulan relatos de afiliados que padecen enfermedades crónicas que no han podido ser atendidos por los problemas administrativos de la transición.
Por su parte, Fecode está excusando los inconvenientes en la atención en la disponibilidad de la información que dejaron los administradores anteriores a quienes les terminaron los contratos para eliminar la intermediación.
“La actual problemática que enfrenta la atención en salud para el magisterio colombiano ha evidenciado la grave situación de la no existencia de una base de datos nacional, actualizada, de fácil acceso, con información completa, historias clínicas, tratamientos, lugares de atención y otros datos de los afiliados al Fomag”, escribió la Federación en un comunicado.