Crecen las voces de rechazo al inquietante anuncio que hizo el presidente de la República, Gustavo Petro, sobre una ley que estaría a la medida de los peores narcotraficantes del país, la cual denominó de reconciliación nacional; le cayeron con toda al jefe de Estado advirtiendo que estaría rompiendo el Estado de derecho en Colombia, beneficiando a criminales.
El exministro del Interior, Daniel Palacios, del gobierno del expresidente Iván Duque, en diálogo con SEMANA, estalló contra el jefe de Estado parándolo en seco advirtiendo que tiene una obsesión para entregar gabelas a narcotraficantes, comprando la situación que vivió el país con el extinto capo Pablo Escobar.
El exfuncionario fue tajante en alertar que el Gobierno Petro ya se arrodilló a las más peligras estructuras delincuenciales del país, poniendo de presente una serie de polémicas medidas que ha tratado de sacar adelante el llamado Gobierno del Cambio.
“En primera medida yo creo que hoy para los colombianos el Gobierno se ha arrodillado, nosotros tenemos un gobierno que su única y principal fijación es ver cómo le da beneficios a los delincuentes y es que, enumerémoslo, tenemos excarcelaciones, tenemos levantamientos desde orden de captura, tenemos una ley de humanización que pretende sacar a delincuentes de las cárceles, tenemos la ley de sometimiento que se tramitó en el congreso y que se hundió en donde se le buscaba dar un tratamiento preferencial”, sostuvo Palacios.
E indicó: “Tenemos cese de acciones por parte de la fuerza pública contra las organizaciones terroristas y criminales que operan en el país, yo creo que rendido ya está el estado hace mucho tiempo, ahora lo que aquí está claro es que si el presidente dice que no se va a arrodillar y lo que estamos viendo es que lo que se busca permanentemente es el beneficio a los criminales es en donde está ese no arrodillarse porque uno no ve una fuerza pública combatiendo estas estructuras criminales, vemos que con impunidad asesinan a los soldados y a los policías de la patria y no hay ninguna consecuencia”.
“Es que uno pensaría que después de lo que ha pasado en el Cauca o en otras partes del país donde han asesinado a miembros de la policía por lo menos debería haber una consecuencia, pero mi pregunta es cuántos muertos tiene que haber para que exista una consecuencia contra esos grupos criminales, ni siquiera se reactivan las órdenes de captura contra esas agrupaciones que claramente están violentando y atacando a nuestra fuerza pública y a la ciudadanía, yo creo que en primera medida el país ya se encuentra arrodillado y que dependerá del congreso no permitir, no permitir que lleven a una capitulación del estado de derechos y de la ley penal en Colombia”, expresó.
También detalló en diálogo con SEMANA: “Yo creo que la Corte Constitucional aquí tiene una labor fundamental en la evaluación que está haciendo también en la ley de paz total que sin duda alguna ha permitido el abuso por parte del presidente de la figura de gestor de paz, porque es una figura que está diseñada para buscar con estos grupos criminales estas organizaciones que de cierta forma se les ha dado una connotación política, se llegue a algún tipo de avance en algún tipo de sometimiento de negociación de paz, pero aquí lo que hemos visto es que esa figura se ha venido extendiendo hacia todo el mundo y todo el mundo, eso sí con una condición, que sean delincuentes y entre peor calaña sean como lo es una persona como Mancuso, entonces vamos a darle ese título de gestor de paz, aquí lo que estamos viendo con mucho peligro es una obsesión por parte del presidente de la república y de su gobierno de darle beneficios a los delincuentes, de excarcelarlo sea como sea”.
Sumado a ello, Palacios criticó abiertamente las acciones del Gobierno nacional para designar gestores de paz a los integrantes de la bandera criminal de La Oficina y lanzó una fuerte pulla “cuál reconciliación ni qué ocho cuartos”.
“Si es delincuente y está condenado o está con una orden de captura, vamos a levantársela para que sea supuestamente gestor de paz y si está sentado en una mesa de negociación y sigue matando y sigue asesinando, pues no va a pasar absolutamente nada y ahora para rematar, seguimos transitando por un camino en donde a los narcotraficantes los queremos de alguna forma justificar y equiparar con la ciudadanía en donde tiene que haber algún tipo de reconciliación, no, no, no, cuál reconciliación ni qué ocho cuartos cuando estamos hablando de personas que ya están condenadas”, anotó.
Gustavo Petro anunció una ley de reconciliación nacional en la que también los narcos pueden tocar la puerta
Desde Ciénaga de Oro, en Córdoba, el presidente de la República, Gustavo Petro, anunció que está trabajando en una ley de reconciliación nacional en la que los narcos podrán tocar la puerta, iniciativa que se presentará al Congreso de la República.
El jefe de Estado, en un vehemente discurso, señaló que el objetivo del proyecto es que ingresen todos aquellos que hayan cometido una ilicitud o en actividades violentas, para que tengan un camino hacia una vida en paz en la nación.
“A esos narcotraficantes les decimos que hay otro camino, que a pesar de los insultos que recibo todo el día y todos los días, en donde me llaman loco, en donde creen que soy un corrupto como ellos, yo les digo: no, también los narcotraficantes tienen aquí un camino”, sostuvo Petro.
Y añadió el jefe de Estado: “Se hará una ley de la reconciliación nacional para que todos aquellos y aquellas que hayan sido incursos en la ilicitud, en la violencia, puedan tener un camino y un vivir en esta nación colombiana, una vez se deje de la mente, del cerebro, de las ideas, la idea de matar al compatriota”.
“La idea de quitar y despojar al compatriota humilde. Este gobierno va a hablar, pero ese hablar no consiste en arrodillarse, en dejarse cooptar, en prácticamente ponerse a temblar porque ofrecen un vaso de whisky con hielo en un club privado muy famoso”, anotó Petro.
Y expresó en la plaza pública: “Este gobierno va a hablar desde el nombre de las personas que votaron por él, que representa a esas personas y queremos representarlas porque nos sentimos felices y contentos haciéndolo”.
“No somos representantes ni de banqueros ni de grandes corruptos, no somos representantes de narcotraficantes y gente sanguinaria, no somos representantes del poder de facto; somos los representantes del campesino, de la campesina, del obrero, de la obrera, del estudiante, de la gente humilde de Colombia y nos apersonamos de ello con orgullo”, dijo finalmente el mandatario colombiano en su discurso que dio esta semana.