SEMANA: ¿Por qué se dice que usted saldrá de la Superintendencia de Servicios Públicos?
Dagoberto Quiroga (D. Q.): Debe ser por eso. De pronto... No sé si el presidente le ha expresado a alguien que de manera inminente voy a salir. Yo le presenté en enero mi renuncia porque ya tenía más de un año. Ahora, al cumplir dos años, volví a presentársela. No es una renuncia irrevocable. Simplemente le manifiesto al presidente que pongo a su disposición la continuidad en el cargo, para cuando él lo estime conveniente. Es una renuncia que le pongo en un WhatsApp que tenemos entre los dos.
Seguramente, si él no se ha pronunciado, es porque lo estará pensando y está a punto de tomar decisiones. Pero el presidente no se ha pronunciado.
SEMANA: ¿Por qué esta vez la opinión pública conoció su renuncia?
D. Q.: Pienso que a alguien le comentó que yo había renunciado y ese alguien filtró la noticia. Empezó a regarse ese mundo de especulaciones que vienen. A veces pienso que ese alguien no tuvo cuidado de expresar. Por eso se dan tantas especulaciones. A veces me pongo a pensar si será parte de una presión que se está haciendo al presidente de la República para que me acepte la renuncia. Están sacando un poco de especulaciones con ocasión de unas reuniones que he tenido con empresas de servicios públicos o por la intervención en Air-e. Ha habido una serie de acusaciones que considero que son infundadas. Pueden tener como motivo presionar al presidente por intereses de que yo esté fuera de la Superintendencia.
SEMANA: Se rumora que podría haber cierto rechazo de un grupo de Presidencia contra los exmiembros del M-19. ¿Cree que puede ser cierto?
D. Q.: Realmente, cuando voy a Presidencia de la República, sólo me reúno con el presidente, junto a los ministros y personas que él convoque. Con nadie más. No conozco si hay grupos que estén en desacuerdo con nosotros. No sé si hay intereses económicos o empresariales para que salga de la Superintendencia. Sólo presto mis servicios, sin pensar en el qué dirán. Sigo mi curso, actúo con transparencia. Si alguien considera que me salgo de los parámetros de la ética, para eso están los organismos de control.
SEMANA: ¿Y quién tiene intereses en que usted salga de la Superintendencia?
D. Q.: Puede que haya intereses, de pronto, de algunos empresarios, personas o políticos para que salga de la Superintendencia. Pero el presidente no ha hecho un solo pronunciamiento. En enero no dijo nada y entendí que no quería que me fuera. Ahora se la volví a pasar, a los dos años en el cargo, pero no ha dicho nada, ni siquiera conmigo.
SEMANA: Carlos Caicedo, exgobernador de Magdalena, dice que usted se reúne a puerta cerrada con “la mafia”. ¿Qué opina?
D. Q.: No sé si la mafia esté suelta y las autoridades del Estado no han hecho nada, pero yo me reúno con los alcaldes porque son las autoridades que deben prestar el servicio público. Me reúno con las empresas prestadoras de servicios, con los usuarios y con los vocales. No sé si entre ellos habrá líderes de la mafia o que el Estado permita que sigan en la calle y no los hayan detenido.
SEMANA: ¿A qué cree que se debe este comentario de Carlos Caicedo?
D. Q.: En las reuniones que he tenido con ellos, en el caso de Char, fue porque él se dirigió a la Superintendencia de Servicios Públicos diciendo que quería colaborar desde la Triple A para resolver el problema crítico de agua en Santa Marta. Hubo una reunión con los técnicos e invité al alcalde de Santa Marta para que escuchara la propuesta de la Triple A. Sólo se habló de la propuesta para aportar para solucionar el problema de agua.
SEMANA: ¿Laura Sarabia se ha comunicado con usted para decirle algo relacionado con su cargo?
D. Q.: Ella me llamó para decirme que si tenía conocimiento de la carta de renuncia. Le dije que le preguntara al presidente, que la carta la tenía él en su WhatsApp privado conmigo. Le dije que le preguntara a él y no más. La última conversación con ella, me dijo que el presidente le comentó sobre la carta, le dije que estaba en el WhatsApp del presidente.
Debió ser el presidente el que me conteste. Es un WhatsApp que tenemos los dos, en el que conversamos de vez en cuando sobre problemas de servicios públicos y problemas de gobierno.
SEMANA: ¿Con el presidente ha habido discrepancias en torno al manejo de las intervenciones a las empresas de servicios públicos?
D. Q.: Hay más concordancia. Obviamente, en las reuniones hay diferentes opiniones. También están otros funcionarios en esas reuniones. Con el presidente no hay razón para tener un problema. Sea afuera o adentro, voy a seguir defendiéndolo.
SEMANA: ¿Dentro del petrismo existe oposición a lo que usted está haciendo?
D. Q.: No lo descarto, que existan presiones de las mismas empresas. No creo que existan empresas con las que se haya cometido una arbitrariedad. Siempre he sido amigo del diálogo, de la concertación y la búsqueda de soluciones. Puede haber intereses económicos y políticos, de todo tipo. Puede haber personas que estén aspirando a ocupar este cargo y acuden a todos los mecanismos para atacarme.
SEMANA: ¿Usted quiere seguir en el cargo?
D. Q.: Si el presidente me dice. Uno tiene un sentido de responsabilidad con el amigo, con el Gobierno, con el proyecto y con el país. Si le toca a uno, le toca. Lo dejo a disposición del presidente. Sin embargo, la situación de cansancio me dice: “Descanse un poco”.