Danilo Rueda, alto comisionado para la Paz, no ha logrado avanzar como lo había proyectado el Gobierno en la paz total, una de las principales banderas del presidente Gustavo Petro desde la campaña. “A los tres meses de ser presidente se acaba el ELN, porque el gobierno hace la paz”, aseguró el mandatario en una entrevista con Vicky Dávila, directora de SEMANA, en el 2021.
Sin embargo, cuando está a dos meses de cumplirse un año de Gobierno, Petro y Rueda no han logrado ese objetivo, tampoco los demás enmarcados en la llamada paz total. No hay resultados en materia de sometimiento de bandas criminales y con las disidencias de las Farc la situación es cada vez más crítica. Y no se ha implementado el acuerdo de paz de La Habana como han criticado algunos sectores, entre ellos el propio santismo, firmante de ese tratado.
Las cifras son contundentes. Los cultivos de coca se registran cerca de las 204.000 hectáreas, los grupos armados ilegales siguen atacando los territorios mientras que la población y la fuerza pública es la que más se ha visto afectada. Solo en la última semana se registró el asesinato de tres menores de edad por parte del Estado Mayor (disidencias de las Farc de Iván Mordisco) y un atentado en Tibú, Norte de Santander en el que fallecieron dos policías y un civil que se atribuyó el ELN.
Ambos hechos le generaron otra oleada de críticas al comisionado de paz, no solo por los hechos, sino por su tono con los criminales. Por un lado, le envió una carta a Iván Mordisco pidiéndole reconsiderar un cese al fuego. Muchos sectores le criticaron el tono condescendiente.
En el caso del atentado del ELN dijo que por lo menos habían reconocido el hecho, lo que ocasionó una tormenta incluso a nivel internacional. El excandidato presidencial Federico Gutiérrez le cuestionó si hace parte del ELN y hasta la directora para las Américas de Human Rights Watch Juanita Goebertus criticó esas declaraciones. “Inaceptables estas declaraciones del comisionado de paz. No es un avance contra la impunidad que un grupo armado se atribuya un hecho criminal. Mal presagio para el éxito de la negociación y de la paz total”, afirmó.
En medio de ese oscuro panorama, distintos sectores han responsabilizado al comisionado Rueda de haber fracasado y por eso piden su renuncia. ¿Qué responsabilidad le cabe al alto funcionario del Gobierno?
Para el exalto consejero para la Estabilización, Emilio Archila, uno de los problemas ha sido el tono de Rueda. “No quisiera hacer una valoración sobre él personalmente, de su trabajo, pero nunca jamás le rogaría a unos hampones que se sienten a hablar conmigo después de que han asesinado niños”, le dijo Archila a SEMANA, haciendo referencia a la carta que envió el comisionado a Iván Mordisco.
Archila considera que en su gestión en el gobierno del expresidente Duque dejó un camino marcado para seguir la implementación de los acuerdos de La Habana, pero eso no se ha continuado. Cree que los problemas del conflicto armado en el país no se pueden resolver en cuatro años y por eso cada Gobierno no puede estar cambiando el enfoque.
Para el exnegociador de paz con el ELN, Juan Camilo Restrepo, el problema va más allá de Rueda y es del Gobierno, ya que desde un comienzo no planteó bien su propuesta de paz total y hoy esa idea no tiene ni pies ni cabeza.
“El comisionado está contagiado de la ambigüedad que rodea a la llamada paz total, que va muy mal. Y dentro de esa ambigüedad las acciones del comisionado resultan desdibujadas y contradictorias. Yo creo que en el fondo todo lo que va muy mal es toda esta política de paz total”, aseguró Restrepo a esta revista.
El exministro considera que no fue buena idea ofrecer a narcotraficantes, guerrilleros, delincuentes y disidentes, a todos por igual, una alternativa sin tener algunas condiciones claras, entre ellas la Ley de Sometimiento. Hasta ahora se radicó la ponencia del proyecto en el Congreso y le faltan los cuatro debates para ser aprobado. Archila asegura que esa ley no es necesaria.
Otro punto que se le critica a Rueda, y al presidente Petro, son los ceses al fuego que han tenido que ser reversados. Esta semana el mandatario anunció el rompimiento del pacto con las disidencias de las Farc, que poco se estaba cumpliendo. Y no salió nada bien cuando decretó en las vísperas del año nuevo pasado que había un acuerdo con el ELN que nunca existió.
“Esto no es solamente del comisionado, esto es del diseño de la política que se ha revelado como un fracaso total”, aseguró Restrepo.
Sobre las negociaciones con el ELN, Restrepo considera que está avanzando a paso “parsimonioso” y que mientras se desarrolla una agenda, alias Antonio García lanza declaraciones desafortunadas desde su cuenta de Twitter, justificando el actuar de ese grupo criminal. “Hay dos ELN, uno el de la mesa de negociaciones y otro el de Antonio García”, aseguró.
En todo caso, considera que la salida de Rueda del cargo no mejoraría el proyecto de paz total del Gobierno y que le falta a toda la línea de mando un tono más firme. “El papel del comisionado de paz no es para hacerle favores, no es para hacerle gracias, no es para ser amable con quien se está invitando a negociar”, dijo.
Más allá de si el presidente Petro decide sacar del cargo a Rueda, los expertos consideran que será fundamental que el Gobierno logre tener el control del territorio y un tono más firme para llegar a acuerdos. Sin embargo, hay alerta porque algunos sienten que se evidencia un retroceso y que Petro y su comisionado hoy no tienen el control para hacer exigencias.