La ley de Víctimas, sancionada por el Gobierno el año pasado, que tiene como propósito “saldar una deuda histórica” con un universo de víctimas calculado en cerca de cuatro millones de personas, modificará parte de la memoria colectiva de los colombianos. Porque según esta Ley, a partir del 2012, todos los 9 de abril se celebrará el “Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas”. Una fecha en la que el Estado colombiano deberá adelantar eventos de “memoria y reconocimiento” de los hechos que han victimizado a los colombianos en el marco del conflicto armado. Pero el 9 de abril ha significado para los colombianos algo distinto. Año tras año, el país recuerda que en esa fecha, pero en 1948, murió asesinado el caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán. Un hecho que marcó el comienzo de la llamada época de la Violencia que desencadenó en la guerra entre liberales y conservadores. Por eso no es fácil admitir que, de un año para otro, el 9 de abril cambie su significado. Gonzalo Sánchez, director del Centro de Memoria Histórica (organismo creado por la Ley de Víctimas), dice que este lunes el país deberá asumir el debate sobre la apropiación de esa fecha y que esta cambie su significado. Guillermo Rivera, representante liberal y coautor de la Ley de Víctimas, recuerda que cuando el Congreso estudió el proyecto se trató de definir una fecha “emblemática” para generar conciencia colectiva, y que esa fecha no podría ser distinta a la del 9 de abril “porque el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán marcó el comienzo de un conflicto que lleva más de 50 años sin llegar a su punto final”. Noventa días después de entrada en vigencia la Ley de Víctimas, el Día de la solidaridad por las Víctimas se convierte en la primera medida en ser aplicada. Para varios de los autores de la Ley, no hubo una plena difusión por parte del Estado, que tendrá el reto de que en el primer día de memoria, sus acciones no se vean improvisadas. Paula Gaviria, directora de la Unidad de Atención y Reparación a las Víctimas, sostiene que el Gobierno se ha preparado. Este lunes, en Villavicencio, el presidente Santos y parte de su gabinete encabezarán uno de los actos principales. Junto al gobernador de Meta, Alan Jara, y los diez uniformados liberados la semana pasada por las FARC, recordarán principalmente a las víctimas del secuestro, una de las mayores tragedias del conflicto, dice Gaviria. Santos culminará la jornada con una alocución presidencial en la que los principales avances de la Ley de Víctimas serán objeto de análisis. Luis Carlos Avellaneda, senador del Polo, reclamó en varios escenarios que este 9 de abril los colombianos interrumpieran su rutina al medio día y se expresaran en solidaridad con las víctimas. Sin embargo, su propuesta no tuvo mayor publicidad. Otro de los actos trascendentes será la obligación del Congreso de sesionar en pleno para escuchar a las víctimas. Según lo dispone el artículo 142 de la Ley de Víctimas, la sesión será permanente, sin límite de tiempo y con las obligaciones para los congresistas de asistir como si se tratara de la instalación de las sesiones o la toma de juramento del presidente de la República. Según la Ley, no hay la misma obligación para las corporaciones públicas municipales y departamentales. Consejos y Asambleas departamentales probablemente no sesionen este lunes, aunque como lo reclamó el senador Avellaneda, el Gobierno ha debido pedir a estas autoridades que también dedicara una jornada para solidarizarse con las víctimas. Quizás el de Bogotá ha sido el alcalde que más se ocupó de programar actos de solidaridad para este 9 de abril. El gobierno distrital de Gustavo Petro dispuso una galería de la memoria por la carrera séptima, una marcha por la solidaridad y un concierto en la Plaza de Bolívar. Y si el gobierno nacional se enfocará principalmente a las víctimas del secuestro, la ley reconoce a las víctimas de agentes del Estado, cuyos colectivos no se han pronunciado sobre la jornada. Ellos argumentan que el 6 de marzo lo han institucionalizado, desde el 2008, como el día de la memoria de las víctimas de agentes estatales. Conscientes del nuevo significado del 9 de abril, los autores de la Ley de Víctimas, liderados por el senador Juan Fernando Cristo, propondrán mayores iniciativas civiles para que los colombianos puedan adoptar gestos de solidaridad con las víctimas. Uno de ellos, promover la financiación de los ciudadanos a la reparación de quienes han sufrido el conflicto.