La delegación de paz del gobierno del presidente Gustavo Petro no escondió su preocupación este sábado 13 de julio porque desde febrero de este año no se sientan oficialmente a avanzar en la agenda con la guerrilla del ELN.
En un comunicado de una página, la mesa de negociación “advierte con preocupación que las labores del proceso se encuentran paralizadas, tanto en los compromisos adquiridos con el desarrollo de la participación de la sociedad civil en la construcción de la paz, como en la necesaria preparación de la prórroga del cese al fuego vigente, que expira en la primera semana de agosto y cuya renovación exige trabajos y discusiones detalladas”.
Sobre la suspensión de las conversaciones, “de manera reiterada se ha solicitado a la delegación de paz del ELN retomar las labores de la mesa para resolver de manera bilateral y constructiva las dificultades que se han presentado, siempre anteponiendo a otras consideraciones la necesidad de lograr cuanto antes la transición a la paz y la protección de las comunidades que padecen los efectos del conflicto armado”, se lee en el comunicado.
El motivo de la molestia de la delegación del ELN obedeció a que el Gobierno Petro negoció al tiempo y sin avisarles un acuerdo paralelo de paz con un reducto armado disidente de los elenos en Nariño.
De hecho, el propio alto comisionado para la paz, Otty Patiño, viajó hasta ese departamento e inició las conversaciones. Y el presidente Gustavo Petro avaló los diálogos desde sus redes sociales.
La guerrilla habló de una “abierta crisis” y denunció que el diálogo regional en Nariño fue montado por el Gobierno “desconociendo la delegación del ELN y la mesa, donde participa la comunidad internacional, oficiando como garantes, así como también la ONU y la Conferencia Episcopal colombiana”.
“Se sabe que los supuestos guerrilleros de Comuneros del Sur, con quienes el Gobierno quiere montar un show mediático en Nariño, están siendo protegidos por unidades de la Unidad Policial para la Edificación de la Paz (Unipep), los uniformados que cuidaron a los firmantes de la paz en el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos. También están protegidas en el entorno por dos unidades de las Fuerzas Militares del Estado”, dijo el comandante del ELN, Antonio García.
Por eso, en el comunicado del Gobierno publicado este sábado, se lee: “Se deja constancia de su insistencia en solicitar y continuar pidiendo a la instancia competente del manejo de los diálogos en Nariño con una estructura que perteneció al ELN, resolver esta nueva situación enmarcando su tratamiento dentro del diálogo social regional. Esto, reconociendo las dinámicas territoriales, pero reafirmando a la mesa nacional como la instancia de negociaciones con el ELN”.
Y añadieron los delegados: “Como ha expresado con tanta claridad la comunidad internacional, no dudamos del valor de los diálogos que se adelantan con el ELN que han mostrado resultados concretos y verificables y la necesidad de que se normalicen, preserven y fortalezcan a la mayor brevedad”.
En el comunicado, los delegados del Gobierno agradecen a António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, y a los estados miembros del Consejo de Seguridad de ese organismo por el respaldo al proceso de paz que se adelanta con el ELN.