El debate de la reforma a la salud ya es uno de los principales en el Congreso. Aunque aún no ha comenzado en forma la discusión en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, ya se analizan algunos de los puntos que contempla la iniciativa del Gobierno.
Desde la oposición, los representantes Andrés Forero (Centro Democrático) y Jairo Humberto Cristo (Cambio Radical) radicaron una ponencia negativa, con el objetivo de hundir el proyecto, porque consideran que sería regresiva para el país.
“Sentimos que esta reforma, en lugar de resolver los problemas que tiene nuestro sistema, los agrava y crea otros nuevos. Entre otras cosas, la reforma fragmenta los recursos de la salud y, al fragmentarlos, lo que termina sucediendo es que fragmenta la atención, afectando principalmente a los pacientes que sufren enfermedades de alto costo o enfermedades crónicas”, aseguró Forero.
Según el congresista, esto implica más riesgos de que se pueda politizar la prestación del servicio porque les daría más protagonismo a los alcaldes y gobernadores para conformar las redes en sus municipios y departamentos.
“Desalinea los incentivos para evitar que se desborde el gasto en salud porque relaja los controles previos, los controles concurrentes y los controles posteriores y por esa razón se pueden repetir las imágenes de los septiembres negros que se vivían en tiempos de los seguros sociales”, denunció el congresista.
Para Forero, esas redes que se están planteando en el proyecto estarían “enmarañadas”, por lo que en lugar de facilitar el acceso a los pacientes terminaría complicándolos. Según el congresista, en el texto del Gobierno no queda claro quién va a ser el que va a responderle al paciente o a quién se le podría presentar una tutela, como sucede hoy, para que se garantice la atención en salud.
En el caso de las EPS, se les terminaría garantizando un mayor pago por hacer menos labores de las que desempeñan hoy.
“Esta reforma no tiene un financiamiento asegurado y esto se complica con el proyecto del Sistema General de Participaciones, que fue aprobado el día de ayer en el Senado de la República en sexto debate”, señaló el congresista.
Forero insistió en que esta reforma no resolverá los problemas que actualmente están viviendo los colombianos con el sistema de salud. Además, que entraría a ser aplicada en dos años, luego de ser sancionada.
El representante a la Cámara por Bogotá le hizo un llamado al Gobierno para que en vez de estar presentado estos textos que no tienen respaldo de casi ningún actor del sistema de salud, se debería hacer cargo de las responsabilidades actuales y resolver los problemas de hoy en día.