La excandidata presidencial Ingrid Betancourt no fue ajena a las controvertidas designaciones del presidente Gustavo Petro en medio de la ‘paz total’, con la que pretende lograr el fin del conflicto con varios grupos armados del país.
Una de ellas es la de ungir a Salvatore Mancuso, exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia, como gestor de paz.
“Es polémico, creo que lo de Salvatore Mancuso es una jugada en contra de Álvaro Uribe. Creo que hay algo como poner al expresidente en una situación de precariedad, pero no sabemos qué hay detrás”, reconoció Betancourt en diálogo con SEMANA.
Así como lo plantea la colombo-francesa, lo contemplan desde el Centro Democrático, el partido del expresidente Álvaro Uribe.
El representante antioqueño Andrés Guerra, quien hace parte de ese partido político, reaccionó esta semana en contra de la decisión del Gobierno.
“Nos creen pendejos. El Salvatore de Colombia, hágame el favor. Mancuso gestor de paz, el nuevo socio de la izquierda descarada, solo tienen un objetivo entre Salvatore y Gustavo, y es joder a Álvaro Uribe como sea”. Además, le dijo a Gustavo Petro: “No te creo. Menos a Mancuso”.
Volviendo a Ingrid Betancourt, también le afirmó a SEMANA “que, con los negociadores de las Farc, en el primer proceso de paz, uno entendía sus perfiles, eran comandantes, hacían parte del Secretariado, habían tenido mando, historia dentro de la guerrilla, pero uno no sabe qué historia de mando tuvo alias Gafas en las disidencias de las Farc. Lo que uno conoce es que el Secretariado lo cuestionó por haberse dejado engañar por la Operación Jaque. Durante muchos años no fue aceptado por el Secretariado y ahora se recicla con las disidencias”, manifestó.
Y es que a Betancourt tampoco le gustó la designación de alias Gafas como gestor de paz de las disidencias. Él fue uno de sus carceleros y el exguerrillero que burló el Ejército colombiano para lograr el éxito en la Operación Jaque y obtener la liberación de la exsecuestrada y los gringos que permanecían en poder de las Farc en las selvas de Guaviare.
“Las disidencias pueden nombrar a quien quieran para negociar y ese es un personaje que cumplió 10 años de cárcel por los crímenes de secuestro. Lo que es grave es que el Gobierno acepte como negociador a una persona que es el símbolo de todo el sufrimiento de las víctimas”, le dijo a SEMANA.
Betancourt recordó a alias Gafas, su secuestrador, como un hombre despiadado. “Tuvo un grupo muy grande de secuestrados, abusó de ellos, nos impuso unas situaciones de tortura psicológica muy altas. Es muy doloroso para las víctimas pensar que, a final de cuentas, mientras no han tenido justicia, al perpetrador, al que abusó, al violento, al criminal, lo premian. Él iba más allá de las órdenes. No solo maltrataba a los secuestrados, sino a los guerrilleros que estaban con él”.
Ingrid se preguntó: “¿Por qué se le premia? ¿Por ser el guerrillero que nos secuestró? Es, realmente, una afrenta al sufrimiento de las víctimas porque de resto no hay nada. No fue comandante y solo se le conoce por haberse dejado engañar por el Ejército a través de la Operación Jaque. Esa es la versión que él sostiene, porque el Secretariado de las Farc lo acusó de cómplice. Por donde uno lo mire es complicado entender”, destacó.