El exministro de Defensa en el gobierno del expresidente Iván Duque, Diego Molano, anunció oficialmente que será candidato a la Alcaldía de Bogotá en las próximas elecciones regionales, que se llevarán a cabo en octubre próximo.
Molano hizo el anuncio a través de su cuenta de Twitter, en la que publicó una carta dirigida a la alcaldesa Claudia López, solicitándole que convoque una consulta popular para evitar que se le hagan modificaciones a la primera línea del Metro de Bogotá.
“El país ha sido testigo durante las últimas semanas del chantaje y la intromisión indebida del Gobierno nacional, que busca frenar el avance de esta obra, condenando perpetuamente a los habitantes de la capital al caos que vivimos cada día. Dicha determinación es irresponsable y genera un profundo temor e incertidumbre en la capital del país”, aseguró Molano.
En ese sentido, el exfuncionario anunció: “Es por ello que he tomado la decisión de aspirar a la Alcaldía de Bogotá, para defender una vez más el avance de la primera línea del Metro de Bogotá, con su contrato de concesión, así como el importante avance que su administración (la de Claudia López) ha tenido frente a la segunda línea del metro hasta Suba”.
De esta manera, Molano no solo oficializó que será candidato a la Alcaldía de Bogotá, sino que además le hizo una petición especial a la alcaldesa López: “la invito para que en el marco de las funciones y de las competencias que le brinda la Constitución Política, con el apoyo del Concejo, a que convoque a una consulta popular el próximo 29 de octubre, de forma tal que defendamos esta iniciativa (la construcción del metro)”, dijo el exministro de Defensa.
Molano acompañó la carta con un video también publicado en su cuenta de Twitter, en el que afirma: “Ante el chantaje y el caos que eso va a significar para la movilidad hacia el futuro, le he solicitado a la alcaldesa de Bogotá y junto al presidente del Concejo de Bogotá que usen el mecanismo de la Consulta Popular, para que el próximo 29 de octubre todos los bogotanos votemos para decir que se haga esta primera línea del Metro de Bogotá”.
En días pasados, el ministro Reyes elevó la polémica con una dura advertencia sobre el futuro del Metro de Bogotá y de otros proyectos de obras para la ciudad, si no se aceptan las modificaciones propuestas por el Gobierno nacional en la primera línea de esta megaobra.
“Es muy claro: si no se acepta, como se ha venido diciendo, que se hagan las modificaciones propuestas dentro del marco jurídico, pues el Gobierno también, en la medida en que financia el 70 % de los otros proyectos, pues esos otros proyectos se van a tener que parar”, afirmó el funcionario.
La advertencia del ministro Reyes se dio a raíz de la polémica que sostienen el presidente Gustavo Petro y la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, sobre cómo debería ser la primera línea del Metro de la capital del país. Mientras que el jefe de Estado ha insistido en que sea subterránea, el contrato se firmó para que fuera elevada, algo que ha defendido la mandataria local.
El pronunciamiento de Reyes se dio después de que el presidente Petro endureciera su postura sobre la primera línea del Metro de Bogotá y señaló que, como está actualmente en su diseño inicial, es un “esperpento” y una “chambonada” e insistió en que debe ser subterráneo, por lo menos en un tramo.
Ahora, a lo largo del lunes 6 de febrero, se registró un nuevo capítulo del ‘agarrón’ en el que están enfrascados el presidente Petro y la alcaldesa López por el Metro de Bogotá; en esta ocasión, la manzana de la discordia fue la compra de predios para el megaproyecto.
Nuevamente por medio de la plataforma Twitter, el mandatario colombiano lanzó agudas pullas en contra de López al advertir que en Bogotá el Distrito estaría adquiriendo bienes sin estudios de diseño.
Y fue más allá el jefe de Estado, pues calificó ese proceso de compra de predios como “expropiación” de las familias que viven en la capital del país, específicamente en zonas de afectación de las obras del Metro de Bogotá.
Aprovechó ese espacio para asegurar que al tener el Metro de Bogotá subterráneo, como ha sido su idea desde un principio cuando fue alcalde de la capital, según él, se valorizan todos los predios.
“Aquí se evidencia cómo compraron predios sin tener estudios de diseño. Expropiaron a familias bogotanas sin tener estudios. Al subterranizar se valorizan todos los predios, incluidos los expropiados por el Distrito. No hay detrimento, sino enriquecimiento patrimonial”, trinó el presidente Petro.