Juan Fernando Petro, hermano del presidente Gustavo Petro, respondió a los señalamientos que hay en su contra por presuntos hechos de corrupción dentro de la política de ‘paz total’ del Ejecutivo.
Juan Fernando respondió al comunicado que el presidente Petro expidió el pasado 2 de marzo en sus redes sociales en el que pidió a la Fiscalía investigarlo a él y a su hijo Nicolás Petro.
“Debido a la información que se rumora en la opinión pública sobre mi hermano Juan Fernando Petro Urrego y mi hijo mayor, Nicolás Petro Burgos, le pido al fiscal general adelantar todas las investigaciones necesarias y determinar posibles responsabilidades”, dijo el presidente Gustavo Petro.
Por esa razón, Juan Fernando responde a esa decisión que tomó su hermano la semana pasada. “Resulta oportuno que la opinión pública en general y los medios de comunicación en particular, con ocasión del comunicado de prensa emitido el 2 marzo del año en curso, por mi hermano, Gustavo Petro Urrego, presidente de la República, solicito que valoren como genuinos sus principios de hombre probo, quien, como nunca lo ha hecho ningún otro mandatario en la historia de nuestro país, frente a la mínima conjetura, que él denomina rumores, decide, sin miramiento alguno, colocar a los suyos a padecer este escarnio público, lo que sin duda traspasa la frontera de lo estrictamente fraternal, para colocarnos como blanco de ataques injuriosos hasta cuando la verdad aflore al final. Y si que aflorará”, dice en su comunicado.
Agrega: “Muy a pesar de la dolorosa congoja que hoy embarga al círculo íntimo familiar entorno a mi esposa, padre, madre y hermana, entre otros, es preciso manifestar que por encima de todo está la Nación, por lo que comparto plenamente el contenido y el sano propósito del comunicado, el cual no es otro que la absoluta tranquilidad que le asiste acerca de que su hermano puede ser sometido a todo tipo de cateo moral y patrimonial”.
Sobre los señalamientos en su contra por posibles casos de corrupción en la ‘paz total’ y presuntos cobros a narcotraficantes para que resulten beneficiados por esa política, Juan Fernando Petro dice que debe “aclarar que no soy un advenedizo en el tema de la paz, ya que, como exmiembro de la Comisión Intereclesiástica de Justicia, Paz y Reconciliación y de la Comisión Latinoamericana de Derechos Humanos, organizaciones no gubernamentales, con epicentro de acción distinto, y sin lazos comunicantes con la Comisión de Paz del gobierno actual, en cabeza de Danilo Rueda, he desarrollado un trabajo silencioso a lo largo de los territorios apartados, en medio de las comunidades, el cual nunca ha implicado el ofrecimiento de beneficios a condenados a cambio de dádivas. Lo que sin duda ha propiciado el surgimiento de conjuras maliciosas, como la del mal llamado ‘pacto de la Picota’, ya aclarado, así como de una tal oficina de abogados que gestiona beneficios a narcotraficantes, que ahora supuestamente dirijo, es el interés político de afectar, a través de mí, y como efecto de carambola, al actual gobierno. Sin duda trabajar en función de la paz toca aristas complejas que tarde o temprano dejan consecuencias y efectos que la sociedad interpretará de una u otra manera”.
Además, indica que está dispuesto a que lo investiguen porque, según él, no tiene nada que esconder. “Mis modestos y normales niveles de bienestar patrimonial, con tendencia a desmejorar, están para el escrutinio público, a disposición de la Fiscalía, entidad que, en diligencia de entrevista ante el Fiscal Barahona, el día 8 de febrero de 2023, tras escuchar mi versión, muy a pesar del deseo de quienes son afines al desprestigio de la familia Petro Urrego, me estima víctima de las aciagas situaciones en que pretenden implicarme”.
En todo caso el presidente de la República Gustavo Petro se cansó de los rumores y de manera directa le pidió a la Fiscalía General de la Nación, para que adelante las respectivas investigaciones que permitan establecer si su hermano Juan Fernando Petro y su hijo Nicolás Petro incurrieron o no en el escándalo de supuestos “sobornos” a “narcos” para ingresar a la ‘paz total’.
Por medio de un sorpresivo comunicado que compartió en su cuenta de Twitter, el mandatario colombiano fue claro en señalar que la única persona, en este caso funcionario, para avanzar en la política de ‘paz total’ es el alto comisionado para la Paz Danilo Rueda.
“El 7 de agosto pasado hice un compromiso con los colombianos y colombianas. Tengo la responsabilidad de ser leal al voto que muchos de ustedes depositaron en mí. Debido a la información que se rumora en la opinión pública sobre mi hermano Juan Fernando Petro Urrego y mi hijo mayor Nicolás Petro Burgos, le pido al fiscal general de la nación adelantar todas las investigaciones necesarias y determinar posibles responsabilidades”, dice uno de los apartes del documento.
Y advierte el jefe de Estado: “De nuevo reitero que el único funcionario que cuenta con el aval del Gobierno para tener contacto con las organizaciones al margen de la ley, con el objetivo único de la búsqueda de la paz, es el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda”.
A renglón seguido, el presidente Petro fue tajante en asegurar que su Gobierno “no otorgará beneficios a criminales a cambio de sobornos. Al contrario, nos encontramos en la construcción de los mecanismos legales para que estas agrupaciones al margen de la ley se acojan a la justicia, reparen a las víctimas y cesen la violencia en las ciudades y demás territorios. La protección de la vida es una prioridad”.
Dudas sobre Juan Fernando Petro
Las dudas sobre Juan Fernando iniciaron en la campaña presidencial, cuando se conoció públicamente que visitó la cárcel La Picota junto con Danilo Rueda, hoy comisionado de Paz. Entonces se habló de “perdón social” y la reunión fue con varios criminales, algunos de ellos condenados por corrupción y masacres. Al mismo tiempo, el entonces candidato Gustavo Petro retiró a Piedad Córdoba de la campaña tras las denuncias en su contra por visitar a extraditables en las cárceles.
Se conoció que les ofrecían la no extradición si Petro ganaba la Presidencia. Eso generó un escándalo en la campaña y puso al candidato a dar explicaciones. Además, Juan Fernando se atribuyó el nombramiento de Rueda. SEMANA reveló el comprometedor audio.
“Tu subdirector (de la UNP) no entiende que yo no soy comisionado de Paz, como Danilo Rueda. Él es comisionado de Paz del Gobierno nacional. Danilo Rueda, de hecho, yo lo puse ahí”, se escucha. Según Caracol Radio, el hermano del presidente se habría reunido en un restaurante de Medellín con 18 narcotraficantes y jefes de bandas delincuenciales de Antioquia. Todos habrían llegado al sitio con pelucas para no ser identificados. El establecimiento se cerró y se apagaron las cámaras de seguridad.
¿Qué papel desempeña Juan Fernando Petro si no está autorizado por el Gobierno para tender puentes con grupos armados ilegales?
Lo paradójico es que mientras el ruido contra el pariente del presidente subía de decibeles, el Gobierno pidió a la justicia levantar las órdenes de captura contra 16 narcos, cinco de ellos extraditables, en medio de la paz total, un tema que disparó las alarmas del fiscal general, Francisco Barbosa, quien las negó.
Las últimas 20 órdenes de captura cuyo levantamiento fue solicitado están en veremos, mientras la Casa de Nariño responde si los disidentes de las Farc recibirán tratamiento político como el ELN o si cumplirán con lo pactado en el acuerdo de La Habana, donde quedó planteado que no tendrá derecho a otra oportunidad.
Entre las órdenes de captura que el Gobierno pretende levantar está la de Javier Alonso Velosa, conocido como John Mechas, jefe de la estructura 33 de las disidencias de las Farc y señalado de atentar el 25 de junio de 2021 contra el helicóptero en el que se movilizaba el entonces presidente Iván Duque, en Cúcuta.