Hugo Aguilar era mayor de la policía cuando participó en la operación que dio con la muerte de Pablo Emilio Escobar Gaviria el 2 de diciembre de 1993. Y, aunque en varias oportunidades ha relatado cómo llegó hasta el hombre más sanguinario y buscado por las autoridades en el mundo, hay una historia a la que no se le conoce su versión.
En diciembre de 2019 circuló la noticia de que Aguilar había aprovechado la cercanía que tuvo con el cadáver al momento de la baja, en el tejado del barrio Los Olivos, en Medellín, para cambiar el arma del narcotraficante y quedarse con la del capo antioqueño.
En diálogo con SEMANA, el exoficial contó su propia historia.
Un día lo llamó el expresidente Álvaro Uribe y le dijo que había un periodista francés y una española que querían hacer una entrevista con la que pretendían revivir paso a paso y cómo fue el asalto y la baja de Pablo Escobar por parte del Bloque de Búsqueda.
“Yo le dije: señor Presidente, yo voy, pero me tienen que dar un esquema de seguridad porque no podía ir a Medellín, me mataban. Fijamos la fecha, llegué hasta la ciudad, estaban los periodistas y les dije que tenía que ser rápido porque el mismo día debía regresar a Bucaramanga. Hicimos el recorrido, fuimos hasta la casa donde dimos de baja a Escobar, en ese momento la vivienda la había comprado un señor de Estados Unidos, creo que el techo todavía existe. Le pedimos permiso al dueño y él nos dejó subir porque la estaban arreglando”, contó.
Según Aguilar, el periodista francés no hablaba español y quien traducía era la reportera de Madrid.
“Cuando íbamos a terminar la entrevista, la reportera me hizo una pregunta. Me dijo que por qué yo no le contaba algo de ficción porque el video saldría en Europa. Por mi falta de experiencia, yo le dije: ‘yo tengo la pistola de Pablo Escobar’”.
Después de unos años- contó Aguilar- “la periodista le comentó a periodistas colombianos que yo había dicho en ese momento que tenía la pistola. Pero eso fue algo de ficción”.
A Hugo Aguilar lo llamaron de la Fiscalía y le preguntaron por qué había hecho dicha afirmación que, sin duda, lo tenía en el ojo del huracán 26 años después de fallecido Escobar.
“Yo reiteré que era ficción y que la prueba reina es que la pistola la tiene protegida la Fiscalía, donde guardan el armamento. Yo no tengo la pistola. La Fiscalía fue y comprobó que el arma está allá, es una Sig Sauer”, detalló.
El coronel en retiro informó a SEMANA que la orden era capturar a Pablo Escobar, pero como él disparó, no tuvieron otra alternativa que darlo de baja.
“Cómo me iba a quedar con esa pistola. La prueba reina de que él sí había disparado era esa pistola porque le hicieron el examen de balística, huellas dactilares que permitieron identificar que era su arma de fuego”, detalló.
En diálogo con SEMANA, Aguilar respondió al general Óscar Naranjo, quien dijo en su momento que él no había sido quien mató a Escobar.
“Nunca he querido entrar a controvertir. Nunca, desde que estuve en el Bloque de Búsqueda, lo vi que hubiera ido a Medellín. Era el enlace entre el ministro de Defensa y la Policía. Toda la información que él le daba al ministro era la que nosotros le suministramos con el coronel Danilo González”, respondió.