Este miércoles 28 de agosto, el director nacional de Prosperidad Social (DPS) Gustavo Bolívar reconoció ante un grupo de senadores que su entidad tiene duplicidad de funciones con el Ministerio de la Igualdad que lidera la vicepresidenta Francia Márquez. Lo hizo en medio de un encuentro donde se analizó el proyecto nacional de presupuesto del Gobierno para 2025.
Bolívar, caracterizado por hablar sin filtros y con franqueza, dijo que “la duplicidad de funciones es algo que nosotros ya sabíamos desde mi ingreso al cargo. Por eso, duramos tres meses haciendo el rediseño institucional que ya está para la firma del presidente Gustavo Petro. Sí tenemos programas que compartimos con otras entidades del Gobierno”.
Gustavo Bolívar no detalló cuáles son las funciones que están duplicadas con otros despachos, pero siempre se ha reportado que son similares a algunas adelantadas por el Ministerio de la Igualdad y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Tampoco reveló cómo se modificarán las funciones de su oficina que podrían cristalizarse en menos de un mes.
El tema debe ser prioritario, resumió el senador de Cambio Radical, quien estuvo presente en la reunión.
“Me preocupa la duplicidad de funciones entre el Ministerio de la Igualdad y el DPS, creo que ya ha habido una improvisación enorme y un problema de arquitectura y diseño de Estado que hoy lo estamos viendo reflejado, precisamente, en el presupuesto y en las funciones que a cada quien le compete”, dijo González Villa, quien cree necesario que el rediseño del DPS, tal como lo anunció Bolívar, se produzca antes de aprobado el proyecto nacional de presupuesto de 2025.
González Villa, en un discurso directo, se refirió a la aparente desconexión que se ve en algunos sectores del Estado. “Hay enormes dificultades de dispersión de programas del Estado en todos los niveles (locales, regionales, nacionales), la falta de intergubernamentalidad para producir resultados. Tenemos enormes dificultades en integrar los esfuerzos para producir un solo resultado y, además, evaluar los impactos para que esos programas no se conviertan en un saco roto y en un fondo sin control del Estado”, manifestó.
Y agregó: “No hay un conversación en el Estado, los gobernadores por un lado, los alcaldes por el otro y la institucionalidad nacional, todo el mundo desperdiciando esfuerzos con programas y programitas sin evaluaciones de impacto y sin una programación y planeación que, realmente, encadene los planes de desarrollo”.
“Hice un llamado a la coordinación intersectorial e intergubernamental para ser más eficientes en la lucha contra la pobreza. Es fundamental la articulación con alcaldes y gobernadores para implementar acciones reales y con impactos medibles”, añadió.
Por último, el senador enfatizó en que el programa Colombia Joven y Jóvenes en Paz debe ir acompañado de una profunda reforma a la educación colombiana. “Un dato preocupante: en el último año, 473.000 niños y niñas abandonaron el sistema educativo”, reportó.
Por su parte, el director del DPS, Gustavo Bolívar, informó que el Plan Nacional de Desarrollo le fijó unas metas de reducción de pobreza. “Por ahora, vamos cumpliendo, pero que con la rebaja sustancial del presupuesto para 2025 se pueden ver amenazadas”, advirtió.