A pesar de las promesas de cambio, el gobierno del presidente Gustavo Petro se ha caracterizado por elegir aliados políticos, amigos y hasta personas cercanas a la primera dama, Verónica Alcocer, en puestos diplomáticos de suma importancia para Colombia en otros países.
Ese es el caso del exrepresentante León Fredy Muñoz en Nicaragua, Camilo Romero en Argentina, y Lina Quessep en Italia. Ella es oriunda de Sincelejo y es amiga de infancia de la primera dama.
A su vez, Elizabeth Carrillo, activista arhuaca cercana a la vicepresidenta Francia Márquez, fue nombrada embajadora en Bolivia. También está el caso de Juan Manuel Corzo, exsenador conservador, en Paraguay.
Así mismo, resaltan casos como el del nuevo embajador de Colombia en México, Álvaro Ninco Daza, quien fue posesionado en este cargo a pesar de no contar con título profesional y acreditar como experiencia haber participado durante tres días en el modelo de Naciones Unidas de su universidad. Esto a pesar de que actualmente hay más de 50 funcionarios de carrera en la categoría de embajador sin ser designados que podrían haber ocupado este lugar.
Sin embargo, esta realidad podría empezar a cambiar luego de conocerse un fallo del Tribunal Superior de Cundinamarca, en el que se declara nulo el nombramiento de Daniel París en el consulado en Ámsterdam, hecho el 19 de julio de 2022.
Lo más llamativo de la decisión judicial es el argumento que presentó el tribunal: “Se logró constatar que existía personal de la carrera especial que pudo haber sido nombrado en el cargo”.
Si bien este nombramiento fue hecho en el gobierno pasado, deja un precedente judicial que podría empezar a aplicarse en nombramientos hechos por el gobierno de Gustavo Petro, pues pone de presente que si hay algún funcionario de carrera en fila para ser designado, se le debe dar prioridad en el nombramiento.
“El Tribunal ratificó lo que nuestra Unión ha sostenido consistentemente: que es ilegal nombrar funcionarios que no pertenecen a la carrera cuando hay personal de carrera con derecho preferente a ocupar esos cargos, y que no ha sido nombrado en el exterior en debido tiempo”, indicó la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular (Unidiplo)
De acuerdo con este sindicato, “este precedente debería impedir que la Cancillería adelante nombramientos políticos en el servicio exterior en la mayoría de los casos. Cuando la Cancillería insista en hacer estos nombramientos ilegales, continuaremos demandándolos sistemáticamente, en defensa del mérito”.
No se puede olvidar que actualmente ya hay 22 nombramientos hechos por el Gobierno Petro que han sido demandados por esta misma causa.
Lo que ha dicho la Cancillería
Según aseguró el canciller, Álvaro Leyva, en este momento el 40 % de los embajadores de Colombia son de carrera.
Eso indica que más de la mitad de quienes tienen a cargo las misiones diplomáticas del país son recomendados políticos o personas que no se prepararon para esta labor.
“Desde el momento en que se ingresa a la carrera diplomática, toma un mínimo de 25 años para alcanzar el rango de embajador, para lo cual hay que aprobar seis exámenes de ascenso”, explicó Miguel Ruiz, de Unidiplo.
Lo más preocupante es que el 60 % de los embajadores de Colombia en el mundo no estudió para ocupar este cargo, y más de 50 funcionarios de carrera diplomática con la categoría de embajador no ocupan la jefatura de misión de una embajada, es decir, están parqueados en otras labores.
Esto no solo implica un desperdicio de talento, sino de recursos, pues a los embajadores de carrera hay que pagarles un salario equivalente a su rango así desempeñen labores de un nivel inferior.
“Los cargos de mayor responsabilidad deben estar en manos de las personas que se han preparado para ello, no se aprende a ser embajador en una inducción de un mes”, aseguró Francisco Burchardt, presidente del Sindicato de Empleados del Ministerio de Relaciones Exteriores.