Varios proyectos de ley que buscan ―según sus autores― proteger a los animales, prometen unas fuertes polémicas en los próximos meses de sesiones ordinarias del Congreso.
Iniciativas para excluir a estos seres de las labores de vigilancia de los ciudadanos o para reglamentar el funcionamiento de guarderías y juntas defensoras están en la agenda de la senadora por la coalición Centro Esperanza-Alianza Verde Andrea Padilla, quien se ha ganado críticas y reconocimientos por sus iniciativas en defensa de los animales.
De acuerdo con lo que han anunciado algunos funcionarios del Gobierno nacional, los congresistas serían citados nuevamente a sesiones legislativas desde el próximo 6 de febrero. Esto con el fin de debatir y votar el proyecto de ley que crea el Plan Nacional de Desarrollo, es decir, la hoja de ruta de política pública del gobierno del presidente Gustavo Petro.
Hacia mediados de marzo, cuando se espera que el Plan de Desarrollo haya sido tramitado en el Capitolio, los legisladores se meterán de lleno en la agenda de proyectos y reformas que el Ejecutivo presente y en las que son de origen parlamentario, grupo en el cual se encuentran las que buscarían proteger a los animales.
Un proyecto que desde ya está levantado ampolla es el que excluiría a los animales de los servicios de vigilancia y seguridad, el cual tuvo un fuerte rechazo por parte de las empresas dedicadas a prestar este servicio en el país.
Una de las principales herramientas con las que cuentan estas compañías para brindar sus servicios de seguridad es la colaboración de perros que son entrenados especialmente para detectar, mediante el olfato, cualquier objeto o artefacto que pueda representar peligro para la comunidad.
Aunque la iniciativa no se ha socializado y solamente se hizo el anuncio, ya hay polémica y las empresas de seguridad no están de acuerdo con la postura de la congresista Padilla.
Según datos proporcionados, hay más de 6.000 caninos que acompañan a los vigilantes en diferentes tareas de seguridad y desde 1970 la seguridad privada ha estado acompañada de estos seres.
Para Empresas Colombianas de Seguridad Privada (Ecos), Padilla está equivocada al señalar que los perros que trabajan en empresas de seguridad son objeto de maltrato animal y, por ello, le pidieron que se dé un debate con altura, ya que ese fundamento no parece ser demasiado sólido como para tramitar un proyecto de ley.
“Estos perros no son víctimas de maltrato, por el contrario, tienen una preparación especial y cuentan con veterinarios especializados, comida especial y cuidados pertinentes. Así mismo, tienen tiempo de entrenamiento una vez lleguen a cierta etapa de su crecimiento. Luego trabajan ciertas horas en el día cuando cumplen su tiempo de servicio, y cuentan con un plan especial de retiro”, indicó el exsenador Guillermo García Realpe, actual vocero de Ecos.
García Realpe fue uno de los congresistas que se destacó en el Capitolio por su constante defensa de los animales ante posibles maltratos
Los otros seis proyectos de ley que buscarían la protección de los animales apenas han sido enunciados y, en algunos casos, no se conocen detalles de su contenido. Según la propuesta, habría uno para reformar las juntas defensoras de animales y otro que buscar el bienestar de los animales que serían explotados en actividades pecuniarias o ganaderas.
Este último, al parecer, cobijaría a los animales que se utilizan para el acompañamiento y traslado de ganado, entre otras labores.
Otras de las iniciativas —y que seguramente dará mucho de qué hablar cuando se programen los debates― buscaría darles “garantías a los animales” y sus cuidadores en la propiedad horizontal, es decir, en conjuntos residenciales, la mayoría de los cuales utiliza esta figura jurídica para existir.
También habrá otro proyecto de ley para poner un impuesto a la exportación de animales vivos, algo que, en principio, impactaría también al sector ganadero, el cual dedica parte de su actividad a la comercialización de carne.
Y las dos últimas iniciativas anunciadas tienen que ver con reglamentar el funcionamiento de las guarderías para animales de compañía, como perros y gatos, y buscar la eliminación del IVA para los alimentos a estos seres que brinden compañía a las personas. El debate está servido.