La exalcaldesa de Bogotá Claudia López volvió a dar muestras de su oportunismo político. A propósito del paro camionero, dijo este jueves que el subsidio al ACPM es insostenible. Sin embargo, llama la atención que ella haya apoyado a Gustavo Petro a la Presidencia, teniendo en cuenta que él prometió en campaña no subir el valor de dicho combustible.
Pero no solo eso. En su mensaje en redes, reconoció que el “petrismo” quería tumbar del poder al entonces presidente Iván Duque. Si eso fue así, como lo dice hoy, ¿por qué respaldó a Petro de forma tan entusiasta en 2022?
La exalcaldesa, en su mensaje, también habló de soluciones para los ciudadanos. Pero se recuerda que, en medio de la pandemia, fue displicente con una humilde mujer que se le acercó, cerca a la plaza de Bolívar, a pedirle ayuda. “Trabaje juiciosa, sumercé”, fue la única respuesta que recibió de la entonces alcaldesa de Bogotá, en un hecho que fue duramente criticado.
“El subsidio al ACPM es fiscal y ambientalmente insostenible, porque se chupa la inversión pública para reducir pobreza y generar empleo, y sigue contaminando el aire y empeorando la salud de la gente. Sin embargo, ese subsidio ha sido prorrogado por todos los anteriores gobiernos para evitar paros como este. En vez de jugar a quién tumba a quién (primero el petrismo contra Duque y ahora el uribismo contra Petro), a los dirigentes políticos les llegó la hora de trabajar para solucionar los problemas estructurales de los camioneros y la carga en Colombia, en vez de seguir en un mutuo y burdo oportunismo politiquero. No son sus egos y cálculos, sino el bienestar de la gente y la productividad del país la que está en juego. Esas soluciones, y no alocuciones distractoras, es lo menos que debe salir de esta coyuntura. Y en todo caso medidas obvias, como las que menciona la señora en el video desde Usme, deben tomarse para mitigar el impacto del paro y facilitarles —con el transporte público— la movilidad a los ciudadanos a sus actividades”, dijo la exalcaldesa en su cuenta en X.
No es la primera vez que Claudia López hace gala de su oportunismo frente a Petro, tratando de desmarcarse, pese a que celebró su triunfo en las elecciones de 2022. “Al fin ganamos”, dijo en su momento. Luego, en una entrevista con SEMANA, en diciembre de ese año, reiteró que volvería a votar por Petro.
“Me siento contenta. Voté por el presidente Petro, creo en el cambio que representa, a mí me ilusiona. Sé que los cambios generan un poquito de inestabilidad, de temor y hay un poquito de incertidumbre. Es parte de lo que trae el cambio. ¡Carajo, pero al fin ganamos! Es que nunca habíamos logrado que las mayorías ciudadanas de centroizquierda o de izquierda ganaran”, aseguró López.
La mandataria también aprovechó su entrevista con SEMANA para elogiar a la vicepresidenta de Colombia. “Hay gente nueva, al fin hay una Francia Márquez. ¿Cuántas Francia Márquez habíamos visto en la política colombiana? ¿Cuántas Claudia López habían podido ser alcaldesas de Bogotá? Nunca. Entonces, bienvenido ese cambio. La mayoría de Colombia es gente como nosotros, trabajadora, humilde, clase media, echada pa’lante, que ha estudiado y trabajado duro, con mucho talento y sin ninguna palanca”, dijo.
En medio del desplome de la imagen de Petro y la crisis de gobernabilidad, ahora Claudia López ha buscado desmarcarse del presidente, pero los hechos son tozudos. La exalcaldesa se la jugó por Petro y, cuando le conviene, se pone de su lado y cuando no, en medio de su oportunismo, toma distancia. Por eso, ha calificado a Petro de “dictador”, “autoritario”, “caudillo populista de izquierda”, “saboteador”, entre otros calificativos.