En un largo mensaje a través de las redes sociales, el presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, se refirió este domingo, 26 de noviembre, a la reunión que sostuvo esta semana con el exmandatario Álvaro Uribe Vélez y representantes del partido Centro Democrático.
El jefe de Estado no se había pronunciado hasta ahora sobre la reunión que se adelantó el pasado miércoles en la Casa de Nariño, por lo que en su trino mencionó los acuerdos y desacuerdos que tiene con el partido de oposición frente al proyecto de ley de reforma a la salud.
En primer lugar, Petro señaló que el Centro Democrático tiene muy baja valoración sobre lo que se ha planteado como el sistema preventivo de los Centros de Atención Primaria y los equipos médicos que recorrerán permanentemente todos los hogares del país.
“Creo que es un error de su parte, porque es este sistema el que disminuiría la mayor parte de la morbilidad y la enfermedad en el país y disminuiría sustancialmente los costos de la salud en unos años... El Centro Democrático piensa que este sistema se puede hacer sin necesidad de ley”, señaló.
Ante esto, resaltó qué fue lo que quiso hacer en el departamento de La Guajira, pero que había sido la Corte Constitucional la que había tumbado el proceso, razón por la que manifestó que este tipo de cambios deben quedar consagrados en una ley.
Petro explicó que las Entidades Promotoras de Salud (EPS) podrán administrar esos Centros de Atención Primaria y cubrir los respectivos territorios, por lo que esta será la puerta general al sistema, desde allí se remitirá, si es necesario, a la red por libre elección del paciente, por lo cual también se les pagará.
Un segundo “gran desacuerdo”, como lo calificó el propio mandatario colombiano, radica en la función de los EPS o aseguradoras privadas, ya que desde el Centro Democrático le manifestaron que quieren que el dinero público de la salud siga manejado por estas entidades.
“Su historia hasta ahora es de fracaso en ese cometido; se han ido 157 EPS, quebrando parte de la red hospitalaria pública y privada, con una deuda de 23 billones, que ningún economista ha traído a valor presente”, señaló el mandatario.
Al mismo tiempo, criticó que las EPS contratan a sus propios hospitales y arruinan los demás. “Hay una construcción hospitalaria evidente, y este es un aspecto positivo, pero en propiedad de los dueños de las EPS, que siguen criterios de mercado y la colocan donde se concentran los sectores poblacionales pudientes y de clase media, la mayor parte del país se queda sin red hospitalaria”, dijo.
Además, resaltó que “esta red hospitalaria ya construida de carácter privado permanecerá en manos de quienes hoy son sus propietarios, pero nuestra reforma busca expandir la red a territorios olvidados y barrios de sectores menos pudientes. La libre elección del paciente sobre su médico, permitirá que la calidad se imponga tanto en la red pública como privada”.
Posteriormente, aseguró que la propuesta del Gobierno es que las EPS no manejen el dinero público ni elijan a nombre del paciente qué médico los atenderá. “A los hospitales, clínicas y consultorios se les girará directamente para que se fortalezcan y la auditoría la harán las EPS contratadas para ello en la Adress, siguiendo el criterio de un tarifario único y diferenciado regionalmente para todos los servicios”.
Entre las coincidencias que destacó con el Centro Democrático destacó la idea de aumentar la capacidad del país pública y privada en educación en ciencias de la salud, especializaciones y en evitar la clientelización política de los hospitales públicos.
Sin embargo, resaltó: “Lo primero que me dijo el Centro Democrático fue que la ley se caería completa en la Corte Constitucional, les dije que se presentaría, en ese caso, de nuevo todas las veces que sea necesario haciendo las correcciones que la Corte diga”.