El Centro Democrático, el partido que lidera el expresidente Álvaro Uribe, enfrenta un verdadero huracán político que, contrario a todo pronóstico, parece aumentar de categoría a medida que pasan los días.

La encuesta de Invamer revelada esta semana y pagada para medir el nivel de conocimiento y percepción de la ciudadanía sobre Miguel Uribe Turbay, uno de los precandidatos del uribismo, no cayó bien porque arrasó por encima de los demás competidores, obtuvo el 43,8 por ciento de los votantes de ese partido frente al 23,3 de María Fernanda Cabal. Le siguen Andrés Guerra (8,3 por ciento), Paloma Valencia (7,8 por ciento) y Paola Holguín (0,8 por ciento).

Los resultados fueron rechazados por Cabal y Valencia, quienes además de grabar un video en el que relacionan las actuaciones de Uribe con el estratega Sebastián Guanumen –quien habló de correr la línea ética en la campaña presidencial de Gustavo Petro–, siguen molestas y no dan el brazo a torcer. SEMANA conoció que Uribe, Cabal y Valencia no se hablan y el ambiente entre ellos cada vez está más tenso. Ni siquiera se saludan, pese a que son compañeros en el Senado, y las heridas no parecen sanarse con pañitos de agua tibia.

Miguel Uribe, precandidato. | Foto: GUILLERMO TORRES

Miguel Uribe dijo que entiende que a sus dos compañeras no les guste la encuesta en la que él es triunfador, no reconoce adversarios e insiste, con un tono conciliador, en que él no pagó la encuesta. Mientras tanto, Cabal y Valencia no tienen intenciones de fumar pronto la pipa de la paz.

Cabal es la más molesta y ha dicho abiertamente que Miguel Uribe hace trampa y juega sucio. Algunos líderes de Cabal hablan de un encuentro entre Miguel Uribe y Germán Vargas Lleras para hablar de 2026. “Si eso es así, Juan Manuel Santos podría meterse indirectamente en el Centro Democrático”, añadió la fuente. La cita no fue confirmada.

María Fernanda Cabal y Paloma Valencia tienen diferencias con Miguel Uribe desde que él llegó al partido y Álvaro Uribe lo puso a encabezar la lista al Senado en 2022, por encima de las dos políticas, que fundaron la colectividad, en la que han transitado por caminos espinosos y acompañado al expresidente. SEMANA conoció que el explosivo video de las dos senadoras contra Miguel Uribe fue idea de Cabal, molesta porque el equipo del bogotano compartió sus resultados favorables con todos los precandidatos.

Paloma Valencia, precandidata. | Foto: Revista Semana

Paloma Valencia, también incómoda, visitó la oficina de Cabal y grabaron el video sin planearlo. Cabal no quedó satisfecha cuando el Centro Democrático escogió internamente a Óscar Iván Zuluaga como candidato único del partido en 2021, pese a que ella punteaba en algunas encuestas. Álvaro Uribe no ha tomado partido en la disputa interna. De hecho, ni siquiera se ha pronunciado sobre el tema y tampoco ha pedido convocar a un encuentro porque estima que el país tiene temas importantes por discutir.

El director del Centro Democrático, Gabriel Jaime Vallejo, tampoco ha convocado a un encuentro para limar asperezas. Es prudente y lo más probable es que espere a que se calmen los ánimos para llamar al orden. “Si esas disputas ocurren iniciando los foros con Uribe, imaginen en junio de 2025”, dijo un congresista del Centro Democrático a SEMANA.

María Fernanda Cabal, precandidata. | Foto: GUILLERMO TORRES

En el corazón del uribismo hay expectativa por el cara a cara entre los tres precandidatos este sábado en Barranquilla, quienes hablarán en el foro exclusivamente del sector minero-energético del país, pero para algunos grupos radicales del partido no está descartado que se lancen pullas. Otros estiman que los precandidatos estarán aconductados porque el foro lo dirigirá Uribe y él no perdonará que el escenario en el que le mostrará al país sus fichas para 2026 se convierta en un ring de boxeo.

Uribe pronunciará este sábado un contundente discurso enfocado en las presidenciales, pero no se referirá a la pelea interna en su partido. Sin embargo, varias voces de la derecha creen que el huracán no debe tomar ventaja porque, tal y como están las cosas, gane el que gane la elección interna, no tendrá el apoyo de toda la colectividad. Mientras sigan las tensiones en el uribismo, en el petrismo quemarán pólvora.