La elección de contralor, que se realizará este jueves 18 de agosto por el Congreso, pasó en menos de una semana de ser un reñido pulso entre María Fernanda Rangel y Carlos Hernán Rodríguez, a ser una proclamación prácticamente cantada de este último candidato.

En apenas 15 días, Rodríguez, que no estaba en las cuentas de nadie, se convirtió en el preferido de las fuerzas políticas.

Este candidato, quien fue auditor general, defensor regional del pueblo y diputado en el Valle del Cauca, obtuvo el puntaje más alto entre los diez candidatos en el promedio ponderado, revelado por el Congreso.

A pesar de las críticas, Rodríguez logró sumar el respaldo del Partido Liberal, el Partido Conservador, La U, Centro Democrático, Mira, Pacto Histórico, partido Comunes y los integrantes de las 16 curules de paz.

Con los votos de esas bancadas, tiene todo para convertirse en el próximo contralor general. Incluso, logró toda una hazaña: unir alrededor de su candidatura al Pacto Histórico y al Centro Democrático, gobierno y oposición.

Este hecho, no obstante, no resulta para nada sorpresivo, pues generalmente las bancadas esperan hasta último minuto para analizar el panorama y si ven que su candidato empieza a perder fuerza, se van con el caballo ganador.

Así ocurrió hace cuatro años con la elección de Carlos Felipe Córdoba, quien inicialmente tenía el apoyo de sectores de Cambio Radical y el Partido Liberal, pero, al final, ante su inminente victoria, las demás fuerzas políticas se alinearon con él y terminó ganando con 203 votos de 270 posibles. Nadie quiere tener un contralor en contra.

Y así ocurrió en esta oportunidad. Hace una semana, las bancadas de Cambio Radical, el Partido Liberal, La U y el Partido Conservador habían firmado un documento en apoyo a la candidatura de María Fernanda Rangel, pero ahora, a menos de 24 horas de la elección, voltearon la torta y se inclinaron por Rodríguez.

Fueron varias las movidas que se hicieron para impulsar su candidatura. La primera fue la recomposición de la lista de elegibles, que se hizo el jueves de la semana pasada. El petrismo logró que Rodríguez, que no había ocupado los primeros puestos en las selecciones iniciales, obtuviera al final el puntaje más alto entre todos los aspirantes.

Para conseguir este promedio se tuvo en cuenta la prueba de conocimiento elaborada por la Universidad Industrial de Santander, la experiencia en la hoja de vida y se le dio valor a la entrevista que les aplicaron los congresistas a los candidatos, un elemento subjetivo que terminó por ser decisivo para poner a Rodríguez como el primero de la lista en puntaje.

Casualmente, el viernes, 24 horas después de haberse confeccionado la lista, el presidente Petro convocó a una reunión a la que asistieron el presidente del Partido Conservador, Carlos Trujillo; la directora de La U, Dilian Francisca Toro, y voceros del Partido Liberal, para conversar sobre “la agenda legislativa” y la representación que tendrían las colectividades en el gabinete.

En medio del encuentro, en el que también estuvo el ministro Prada, surgió el tema de la elección de contralor. El pedido del Gobierno fue hacer prevalecer la meritocracia; es decir, escoger entre “los primeros de la lista”. Luego, durante el fin de semana, Petro anunció finalmente los nombres de su gabinete, en el que los partidos tradicionales tuvieron sus cuotas de representación.

Adicionalmente, según le dijeron fuentes de La U a SEMANA, el ministro del Interior sostuvo conversaciones con líderes de esta colectividad para hablar de diferentes temas, incluida la elección de contralor. Curiosamente, luego de estas charlas, La U anunció su apoyo a Rodríguez. Lo mismo hizo la bancada de Cámara del Partido Conservador.

Ya con estos apoyos, sumado al que había anunciado con anterioridad el Pacto Histórico, era inminente la llegada de las demás fuerzas políticas, a excepción de Cambio Radical, que hasta el momento no ha anunciado si cambió de posición o no, a la candidatura de Rodríguez. Para los partidos, más allá de las convicciones, lo importante es tener de su lado al contralor. Buscan estar con el caballo ganador.

En todo caso, si bien parece inminente su elección, Rodríguez aún no se puede confiar. Hace cuatro años, apenas unas horas antes de la elección de contralor, el ganador era el presidente de Fedegán José Felix Lafaurie, pero tras un encuentro que sostuvieron los expresidentes Álvaro Uribe, Andrés Pastrana y César Gaviria, todo se volteó y ganó Felipe Córdoba. La política es dinámica.