Este lunes, cuando inicia el segundo ciclo de negociaciones entre el Gobierno y el ELN, la guerrilla denuncia un supuesto caso de “falsos positivos” perpetrados por la Armada Nacional. De acuerdo con el grupo insurgente, 7 de sus guerrilleros fueron “masacrados” por los uniformados.

De acuerdo con un comunicado del comando central del ELN, una unidad de 14 guerrilleros, que se encontraba ubicada cerca del caserío El Cacao, sobre el río Raposo del municipio de Buenaventura, fue atacada por tropas de la Fuerza Naval del Pacífico.

De acuerdo con la guerrilla, los hechos ocurrieron el pasado 28 de enero a eso de las 6 de la mañana. Aseguran que el primer guerrillero fue asesinado en el puesto de guardia y después hubo una “emboscada” a una lancha, en la cual se movilizaban 6 combatientes, de los cuales 4 habrían muerto a manos de los uniformados.

“Los otros dos fueron capturados y los subieron vivos a las lanchas Piraña de la Armada, pero momentos después fueron ejecutados. Otros 5 guerrilleros se refugiaron en una cueva cercana, en donde fueron capturados, desarmados e inmediatamente acribillados, delante de pobladores que iban en una lancha inmovilizada por los soldados en ese sitio”, denuncia el comando central del grupo insurgente.

La delegación del ELN y el gobierno en México, reanudando la mesa de negociación. | Foto: NO

Según la guerrilla, quienes perpetraron el supuesto ataque llevaban brazaletes de color rojo y verde claro y “actuaron apoyados por helicópteros de la Armada”.

“Gracias a que se ocultaron bajo la arena y los matorrales, dos guerrilleros sobrevivientes pudieron informar los detalles de la masacre de los 7 guerrilleros ejecutados en estado de indefensión”, dice el comunicado.

Según la guerrilla, quien comandó la patrulla justificó los ataques con la siguiente frase: “Hay que acabar esta estructura por completo, hay que matarlos, no pueden salir con vida”

Además, aseguran que se trató de un caso de “falsos positivos” porque las bajas no ocurrieron en combate.

Aureliano Carbonell y Pablo Beltrán, negociadores de paz del ELN. | Foto: Mesa de Diálogos entre el Gobierno Nacional de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional - ELN

“A los cadáveres de los guerrilleros les colocaron botas, chalecos con municiones y fusiles para presentarlos ante el coronel comandante del batallón como muertos en combate”, denunció el grupo insurgente.

La guerrilla le reclamó al Gobierno por el presunto ataque a sus guerrilleros, asegurando que rompe la promesa de no cometer violaciones a los derechos humanos.

“Exterminar al contrario es una práctica genocida, acribillar un combatiente en estado de indefensión es un crimen de guerra y disfrazar cadáveres de ejecutados inermes, es conocido como falsos positivos, hechos bárbaros que ocurren bajo un Gobierno que ha expresado su condena pública al terrorismo de Estado y ha afirmado que no consentirá corrupción ni violaciones a los derechos humanos y al Derecho Internacional Humanitario dentro de las Fuerzas Armadas”, agregó la guerrilla.

A pesar de la denuncia, la guerrilla del ELN asegura que mantiene su voluntad de trabajar por la “solución política del conflicto”, la cual está en desarrollo en este momento y se reanudaron las negociaciones en un segundo ciclo.

El Comando Central del ELN emitió un duro comunicado contra el Gobierno Petro.

De acuerdo con el comunicado, se trata de un momento en que “los vientos de cambio buscan dejar atrás al viejo régimen con su infame doctrina de seguridad, su depredador modelo económico, su corrupción sistémica y la subordinación a los intereses imperialistas”.

El objetivo de los delegados del Gobierno en el segundo ciclo de negociaciones es avanzar para que el ELN acepte hacer parte del cese multilateral al fuego propuesto por el presidente desde finales de 2022. Al menos, en eso fue insistente Gustavo Petro en una reunión que sostuvo con su equipo en un reciente encuentro privado en Bogotá.

Pese a las diferencias, las partes se encontraron este fin de semana y posaron para una fotografía que divulgaron a través de sus redes sociales.